Tres propuestas para disfrutar de la Costa

1. El avistaje, a pleno

La temporada de avistaje embarcado de ballenas y otros mamíferos marinos está a pleno en el golfo San Matías. Hasta el 12 de octubre inclusive, la actividad, que se realiza durante todo el año, tendrá la particularidad de incluir la opción de avistar cetáceos, que en esta época llegan a la zona para reproducirse. Y eso es lo que hace tan especiales las salidas. Es que, transcurrida la franja que va desde finales de julio hasta bien entrada la primavera, las navegaciones sólo permitirán apreciar a la fauna que posee en el lugar su hábitat permanente, como los lobos de uno y dos pelos, los delfines comunes y oscuros, los pingüinos y una rica avifauna.

Debido a esto, la posibilidad es imperdible, para disfrutar como en una platea preferencial de los inmensos mamíferos. Este año los embarques se efectúan desde dos puntos. A saber, el Puerto San Antonio Este, ubicado a 65 km de Las Grutas por Ruta 3, o la villa balnearia, con salidas desde la tercera bajada.

Los paseos están a un precio promocional de $1.000, y poseen una duración de alrededor de dos horas y media. Se parte en semirrígidos con un máximo de 10 pasajeros. Por eso, la experiencia es personalizada.

2. Museo Casa Jacobacci

Hay lugares que permiten disfrutar de un viaje hacia el pasado. Y el museo que se levantó en la casa que se construyó en esta ciudad para el ingeniero Guido Jacobacci es uno de ellos.

La vivienda, que es una joya de la arquitectura ferroviaria, está junto a la ría de la localidad, en un marco de gran belleza natural. Su construcción data de 1909, cuando el profesional viajó junto a su familia para instalarse en la zona para supervisar la creación del actual tendido ferroviario que une la Costa provincial con la zona andina.

Años atrás, el lugar fue restaurado y puesto en valor por la Fundación Azara. Las dependencias de la vivienda se acondicionaron de tal manera que hoy cuentan con 10 áreas en las que pueden observarse las características históricas, culturales y naturales de la Bahía local. Hay una sala dedicada a la geología, dos a la paleontología, una que muestra la biodiversidad del monte, otra en la que se puede apreciar el medio ambiente marino, una destinada a la arqueología y otras dos a la etnografía. El resto gira en torno a la historia del ferrocarril, y a los usos y costumbres de la época de la que data la edificación.

Puede visitarse de viernes a domingos a partir de las 16. Y también durante los feriados.

3. Hacia Piedras Coloradas

Disfrutar de la naturaleza siempre es una buena opción. Y ahora, que la primavera se siente en el aire y el clima comienza a mostrarse benigno, mucho más. Por eso los que decidan viajar a Las Grutas pueden aprovechar para explorar a pleno la belleza de las playas.

Una gran alternativa es recorrer a pie la distancia que separa el balneario Piedras Coloradas de las playas céntricas. El lugar, ubicado a 5 km hacia el sur, sorprende con su costa de fina arena salpicada de enormes rocas rojizas.

Ese color se debe a la presencia de un mineral llamado feldespato. Algunos consideran que este componente les aporta a esas piedras una particular energía. Por otra parte, como ocurre con todas las playas del balneario, el paisaje se muestra diferente si se recorre con el mar a pleno o en el momento en el que el agua comienza a retirarse. Además, en temporada baja, allí funciona una casa de té. Un lugar ideal para visitar al cerrar el paseo.

El golfo San Matías, en temporada baja, ofrece muchas opciones. Desde playas apacibles hasta paseos didácticos y navegaciones por la bahía San Antonio.

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