Video: “¿Qué onda contigo cachorrón?»: un encuentro mágico, en el mar de Puerto Madryn

Diego Castilla se sumergió en el mar de Puerto Madryn, Chubut y fue atacado por los mimos de unos cachorros de lobos marinos. Además del avistaje de ballenas, este destino tiene mil formas de sorprenderte.

Los días invernales en Puerto Madryn ofrecen experiencias que fusiona la adrenalina del buceo con la magia de la convivencia con los lobos marinos. Fotos y videos: @diegokastilla.

Diego Castilla nació en un lugar alejado del mar. Creció en la inmensidad verde del Amazonas colombiano, donde el océano era solo un sueño lejano. Cuando finalmente lo conoció, se enamoró perdidamente. La vida, el destino o tal vez una fuerza invisible lo condujeron a la Patagonia, a Puerto Madryn, Chubut, donde no solo el mar lo esperaba, sino también sus animales, vegetación y su naturaleza imponente.

En la pantalla del teléfono, una escena se desarrolla. En su Intagram (@diegokastilla) muestra a un grupo de lobos marinos que nadan hacia él, uno de ellos se sube a su pecho, parece querer besarlo, comerle el snorkel, lo hunde y viene su amigo de atrás como refuerzo. Diego, con una sonrisa, los recibe: “que onda contigo cachorrón. Te llevo a mi casa, creo que se enamoró”, bromea.

Diego es un viajero que desde hace años recorre el mundo, hace fotos increíbles y captura momentos inolvidables, como el día en que encontró a una nadadora con un lobito que la acompañaba a su lado. Esta temporada comenzó a ofrecer la actividad de snorkeling con lobos, que es una de las actividades más demandadas en cuanto a fauna, y también bautismos submarinos y buceo en naufragios.

Desde Madryn cuenta como es esta actividad. “Para mí, es una sorpresa todos los días. Nada es predecible, y eso es lo que me encanta. Los lobos marinos son muy sociables. Ese momento justo teníamos la cámara en mano y fue una de esas cosas aleatorias y mágicas que ofrece el mar”, dice.

La conexión de Diego con el océano es profunda y siempre lleva como bandera el respeto. “Siempre que entro al agua pido permiso. Vincularme con el agua, ya sea nadando, haciendo snorkel o buceando, me ofrece una experiencia distinta. Confío mucho en la actividad porque sé las normativas que se deben cumplir. Les comento a los turistas sobre las distancias a mantener, el silencio, y cómo generar un encuentro armonioso”.

Para nadar con los lobos, se dirigen a la reserva Punta Loma, una de las primeras en Argentina. Es una reserva de lobos marinos, mayormente habitada por cachorros y hembras en esta época, ya que los machos se van y retornan cerca del verano para la época reproductiva. Por eso, este es un gran momento para convivir con los cachorros, que son muy curiosos. Si bien las madres están, son más reservadas, pero también sociables.

“Pasan a tu lado, te ven y continúan. Nunca he experimentado agresividad. Incluso fuera de la reserva, en mis días libres, los lobos se acercan a nadar conmigo. Es impresionante”, cuenta el colombiano más patagónico.

Todos los que quieran vivir la experiencia pueden hacerlo. Hace unos días, Diego invitó a su mamá que con 61 años por primera vez entró al agua, en medio de un día frío y se hizo amiga de la fauna local.
“Gracias a los trajes de neopreno y los secos, podemos estar hasta una hora en el agua sin pasar frío. La gente se copa mucho con la excursión. Yo disfruto mucho haciéndola y trato de transmitir eso”, dice.

A lo largo del camino, los visitantes pueden también avistar fauna autóctona como guanacos, martinetas y choiques, que suelen acercarse a saludar. No solo se trata de un momento de diversión, sino que para Diego, esta conexión tiene un sello más profundo.

Diego invitó a su mamá que con 61 años entró al agua.

“Es importante que la gente se vincule con el mar para tener un sentido de pertenencia y cuidarlo. Antes se mataban lobos para el comercio, ahora nuestro vínculo es de admiración y compartimos con ellos. Desde la biología, también hay una necesidad de difundir y vincular a la gente con la flora y fauna marina”, dice .


Bucear en Puerto Madryn


En 2018 Puerto Madryn fue declarada Capital Nacional de las Actividades Subacuáticas por la Cámara de Diputados de la Nación. La ciudad es reconocida internacionalmente por la transparencia de las aguas del Golfo Nuevo y la gran diversidad de vida que prospera en sus parques submarinos.

Pueden hacer un bautismo, una primera bajada sin preocuparse por el manejo del equipo. El instructor les enseña a respirar y mantener la calma. También hay buceos en naufragios, en barcos hundidos que se llenan de fauna marina y ofrecen un paisaje distinto, pero estos son para buzos certificados.

“Bucear es entrar en otro mundo. Son otras leyes. Creo que es lo más cercano que vamos a estar del espacio exterior, porque es como levitar cuando usas la flotabilidad a tu favor. Algo que a mí me llega mucho es el silencio bajo el agua. Siento que es necesario en nuestras vidas para vincularnos con nosotros mismos. Al fin y al cabo, descubriéndonos a nosotros mismos que podemos empezar a descubrir un poco más nuestro mundo”, concluye se sumerge.


Los precios de estas actividades


El snorkeling con lobos marinos cuesta 120.000 pesos, con un 10% de descuento para grupos familiares o pagos en efectivo, mientras que un bautismo submarino cuesta 100.000 pesos. Dura aproximadamente dos horas y media. Se te proporciona el equipo de neopreno, y luego se hace una navegación de 20 a 25 minutos hasta llegar a la reserva.

Las empresas prestadoras ofrecen el equipamiento necesario.

La permanencia en el agua es de 40 minutos, según lo permite la reglamentación de los guardafaunas. Después, se sube a la lancha, se toma algo caliente y vuelven a la oficina. Allí, podés tomar una ducha caliente y estarás listo para seguir con las actividades del día. Las actividades con Aqua Tours, la operadora con la que trabaja están en @aquatours_buceo.


Si vas a Puerto Madryn, el imperdible es el avistajes de ballenas


A la costa de Chubut llegan cada año las ballenas al Golfo Nuevo para reproducirse y tener a sus crías, que no se despegan de sus madres. Ese extraordinario espectáculo natural se puede ver a metros de la orilla en el Área Natural Protegida El Doradillo, o embarcándose en Puerto Pirámides.

La temporada de ballenas se extiende hasta octubre, así que aún quedan varios días por delante.
Los precios del avistaje embarcado: de junio a agosto: 95.000 pesos un adulto. Entre 4 y 12 años, 47.500 pesos.

Diego comparte sus historias de viaje en el Instagram @diegokastilla. Fotos y Videos: Diego Castilla.


Certificado según norma CWA 17493
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios

Exit mobile version