El Laberinto Patagonia es el más grande de Sudamérica y esconde esta belleza
Omar Moya @omaralexismoya y cuatro amigos llegaron hasta El Hoyo a recorrer el laberinto hecho de cerco vivo, de 8.500 metros cuadrados, con 2.200 metros de sendero para recorrer y un circuito con nueve puertas a descubrir
Laberinto Patagonia el más grande de América del Sur. Foto: @omaralexismoya.
A pocos kilómetros de El Hoyo, en la provincia de Chubut, más precisamente en el valle del Río Epuyén, a 15 kilómetros de El Bolsón y a 14 kilómetros del Lago Puelo, se encuentra el laberinto Patagonia, el más grande de Sudamérica y el cuarto más grande del mundo. Omar Moya llegó hasta allí con su drone y encontró un lugar de calma, lleno de misterio, diversión y belleza.
Con sus cuatro amigos se bajaron del auto, con el termo y el mate abajo del brazo en el predio de cinco hectáreas rodeado de bosques nativos que brindan una vista fascinante al cerro Plataforma y el cerro Pirque. Venían de El Bolsón y decidieron conocer ese lugar del que tanto se habla. “Justo estaba abierto por el fin de semana largo. La verdad que es hermoso, un espectáculo el lugar”, dice Omar Moya.
Cuenta que son puertas que van cambiando cada tanto. Eso hace que siempre haya maneras diferentes de recorrerlo de punta a punta. Al llegar a la salida, los esperaban unos pochoclos calentitos, que vendía a $400 pesos la bolsita.
Video: Omar Moya @omaralexismoya.
Atravesaron 8500 metros cuadrados con plantaciones ordenadas de las especies exóticas cupressus arizónicas y macrocarpas. Estas dos especies de árboles le dan al laberinto diferentes tonalidades, la primera especie le da al laberinto un color azulado y la segunda tonos alimonados.
El laberinto de El Hoyo es uno de los siete que hay en Argentina y el más grande de Sudamérica. Los otros están en Mendoza, Misiones, Córdoba y Buenos Aires.
“La verdad es tre-men-do», subraya Omar y no duda en recomendar el paseo. En su caso, en el fin de semana largo, la entrada les salió $1200 y los residentes de la Comarca Andina tenían descuento.
Después que salieron del laberinto se quedaron un rato en el predio, disfrutando del parque. En una confitería dedicada a la repostería con frutos de la zona, que los dueños cosechan en esa misma chacra, compraron unas porciones de torta y tartas para probar las delicias de la región. También se venden allí muffins, alfajores, sandwiches, jugos naturales, cervezas artesanales y más.
Como dicen en la página del sitio, los dueños del lugar: «El laberinto es un símbolo del mundo espiritual, una representación de los caminos alternativos y las encrucijadas que se nos presentan en la vida. Visitarlo, transitarlo, habitarlo es una propuesta estimulante y una invitación al conocimiento personal».
Desde la ruta nacional 40, en El Hoyo, se abre un camino a la derecha que conduce al desemboque del río Epuyén. Está bien señalizado y son 3,700 metros de distancia del centro del poblado. Todavía no está abierto de manera permanente, sino que abre los fines de semana largos.
El finde del 17, 18 y 19 de noviembre se encontrará abierto desde las 10:30 de la mañana. Y desde el sábado 22 de diciembre, abrirán todos los días desde las 10:30 horas hasta Semana Santa. Esta será su novena temporada y en el verano se realizan encuentros, espectáculos artísticos, actividades y experiencias de todo tipo.
Para más información, los datos están disponibles en la página www.laberintopatagonia.com o en info@laberintopatagonia.com, 0294 4450588.
Omar siempre comparte sus producciones en @omaralexismoya
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