visita a la vinoteca

Una alternativa diferente y atractiva para los ratos libres. Aquí, el testimonio de Anabella Alcuaz, de Patagonia Vinos, ubicada en San Carlos de Bariloche. “Visitar una vinoteca es una experiencia placentera para los amantes del buen vino y la gastronomía. El vino es el denominador común entre quien atiende una vinoteca y quienes entran a elegir algo especial. Y como el vino sabe más rico cuando se comparte, se suma el placer de elegirlo pensando en la reunión familiar del domingo, en agasajar amigos o como toque especial para esa cena de a dos. Este entorno especializado de una vinoteca nos brinda la diversidad que necesitamos, y tal vez el consejo indicado que haga que nos animemos a probar algo nuevo y distinto, que no necesariamente tiene que ser más costoso. ¿Qué puedo recomendar para el verano? Pensando en una época en la que surgen los encuentros informales, las ensaladas livianas y las picadas al aire libre, recomiendo acompañarlos con un vino rosado. El rosé se adapta de maravillas a los quesos y fiambres, brindándonos la frescura que necesitamos en esta época del año. Tiene la gran ventaja de estar a mitad de camino entre un blanco y un tinto, y se bebe entre 10 y 12°C. En el mercado encontraremos de excelente relación precio-calidad. Así que los invito a dejar de lado ese viejo prejuicio de que el rosé es para las damas, o que se elabora coloreando un vino blanco con algo de tinto. Se produce a partir de uvas tintas, en nuestro país generalmente de malbec o de cabernet, vinificadas con los más altos estándares de calidad, como si fuera un vino blanco. Unas pocas horas de contacto de la piel de las bayas con el mosto alcanzan para aportarle aromas de frutos rojos, una cierta textura y estructura en boca, y ese atractivo color rosa o salmón. ¡Que lo disfruten! ¡Salud!