Viedma: casi 50 milímetros en una hora
La intensa lluvia anegó calles, inundó viviendas pero ningún vecino de la Comarca debió abandonar su casa.
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Breve pero intensa. Así fue la lluvia que madrugó ayer en la Comarca Viedma Patagones. Comenzó a las seis menos cuarto de la mañana y se mantuvo por una hora copiosa y con truenos, una tormenta típica de verano que anegó calles, patios, ingresó a viviendas y complicó la circulación de vehículos.
Según pluviómetros de particulares en el radio urbano de Viedma cayeron 45 milímetros y en la zona del Idevi 35, sólo en una hora. A media mañana el cielo se despejó y el calor se apoderó nuevamente del ambiente superando los 30 grados.
Desde el municipio de Viedma se informó que varias arterias debieron ser cortadas al tránsito y hasta los colectivos se vieron obligados a cambiar recorridos en algunos barrios.
Las cinco estaciones de bombeo de la ciudad funcionaron con normalidad. La situación más complicada se produjo en el sector norte, donde no existe un sistema de pluviales con estación de bombeo. También se cortaron algunas calles céntricas.
La información destacó que la ciudad está preparada para drenar hasta 13 milímetros por hora, cantidad que fue triplicada según “registros propios, en coincidencia con una pleamar importante de 4.40 metros”.
Agregó que cuatro cuadrillas recorrieron la ciudad desde la madrugada. Una se dedicó a las estaciones de bombeo, limpiando la basura que llegó por las bocas de tormenta. Otra de Sociales, recorriendo los sectores para asistencia a familias que lo necesiten, mientras que una de tránsito se dedicó al corte de circulación. Finalmente, un grupo de Obras Públicas se encargó de destapar los sumideros que, por el arrastre de basura de la vía pública, perdieron capacidad de drenaje.
En ese marco se solicitó a los vecinos colaboración no dejando en la vía pública basura que pueda obstruir los sumideros.
En Patagones los Bomberos tuvieron 20 intervenciones desde las 6.30 al mediodía, todas por las consecuencias de la intensa lluvia. Hubo calles y patios anegados cuyos drenajes naturales se vieron desbordados, situación que inundó viviendas tanto en barrios y villas que se encuentran en el sector más alto de la ciudad como en los más cercanos a la costa del río. Esta vez la pronunciada inclinación de las calles hacia la costanera tampoco fue suficiente para ayudar a un desagote rápido como en otras oportunidades. Los bomberos voluntarios de la ciudad también debieron intervenir ante problemas en bocas de tormenta, cajas y pilares eléctricos.
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