Un paraíso encantado en pleno desierto patagónico

Hay que recorrer 15 kilómetros desde Jacobacci hacia el norte por la Ruta Provincial 6 para encontrar la laguna Carrilaufquen Chica, que en lengua mapuche significa laguna verde.

Esta gota de agua en el desierto tiene 400 hectáreas de superficie sobre un total de 700 de todo el parque. Es muy significativa la gran cantidad de aves que conviven y que van pintando de colores cada pedacito, cada rinconcito para ser observado como una gran pintura.

El lugar es ideal para los amantes de la observación de aves y de la fotografía. Solo hay que salir a caminar para encontrarnos con cada uno de los habitantes de esta encantadora laguna: cauquenes, coscorobas, macás, patos crestón, gaviotas capucho café, sobrepuestos, gavilán ceniciento, están ahí, en ese mágico espacio.

Pero el gran espectáculo está dado, con todo su colorido y belleza, por los flamencos. Cientos de ellos danzan como haciendo una coreografía que va de un lugar a otro, para que el espectador en silencio contemple toda la maravilla que van regalando a su paso.

Este lugarcito en el desierto es como un paraíso encantado, uno recorre kilómetros y kilómetros de aridez de una estepa patagónica interminable, pero al llegar a esta laguna, los colores, los sonidos y el movimiento dan una mágica sensación de enamoramiento.

Dos patos crestón