Un día de pesca con un mate para cada uno en Villa Pehuenia Moquehue
El relato de un guía de su primera salida con pescadores en este paraíso neuquino donde el reglamento permite probar suerte con la caña en tres lagos en estos días. Pueden ir los residentes habilitados de la Microrregión Centro Oeste.
El joven policía de 24 años murió ahogado en el Lago Moquehue. Foto: Archivo.
Alcohol en gel, un mate para cada uno y distancia social: así fue la primera salida con un guía de Villa Pehuenia Moquehue después de la larga espera que siguió a la suspensión en marzo de la temporada de pesca.
La pandemia había obligado entonces a la cancelación de reservas a mediados de marzo. En agosto, Neuquén comenzó a reactivar las actividades turísticas a través de las microrregiones, una idea que en las últimas semanas se complicó por el retorno de varias localidades a la fase 1.
En el caso de la Centro Oeste (con excepción de Zapala, en fase de circulación comunitaria del virus) los aficionados a la pesca tienen la opción de ir a probar suerte a los lagos Moquehue, Aluminé y Nompehuen en Villa Pehuenia Moquehue, donde se puede ir en busca de la trucha soñada ya que por reglamento están habilitados para la actividad en esta época.
Siempre con devolución obligatoria, es posible intentarlo de vadeo, usando líneas de hundimiento y moscas streamers o bien embarcados para llegar a los veriles más lejanos. Así, de a poco, las cañas volvieron a verse por estos maravillosos escenarios.
“Los primeros pescadores se contactaron conmigo y decidimos concretar una salida. La primera excursión de pesca después de tantos meses, la primera excursión con una modalidad nueva, respetando los protocolos, dejando atrás costumbres tan típicas de una mañana de pesca y con un mate para cada uno y la distancia necesaria”, relata el guía Ricardo Maorenzic.
A fines de agosto, cuando en un año normal se estaría en la previa de un k 42 y todo su movimiento, dos pescadores de Zapala llegaron a Pehuenia para disfrutar de su pasión. Por estos días no podrían repetirlo, ya que Caviahue Copahue restringió el paso a los zapalinos.
Pero al menos pudieron ese domingo caminar la costa del lago Moquehue y pescar con streamers y líneas de hundimiento: así aparecieron las truchas fontinalis que devolvieron.
«Buenas capturas, buena pesca, fue un excelente día pudiendo ‘leer’ las aguas de este hermoso lago neuquino», agrega Ricardo.
Ahora, como todos, el guía espera que pase la pesadilla y de a poco se reactive la actividad y los ingresos, siempre con los cuidados comunitarios e individuales indispensables.
Paradojas de un año tan extraño, para los residentes de este paraíso son días casi normales que disfrutan en soledad, sin el bullicio de las visitas de otras temporadas y extrañando la antigua normalidad.
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