Un brote de coronavirus afectó al hogar «Hermanitas de los Pobres» de Neuquén

Un brote de coronavirus afectó al emblemático hogar de adultos y adultas mayores de Neuquén capital «Hermanitas de los Pobres». El primer caso fue detectado el jueves pasado y el fin de semana se hisopó no solo a quienes residen allí –cuyo promedio de edad es de 86 años– sino al personal que trabaja y a las monjas que prestan servicio. El 90% dio positivo.

La información fue confirmada por la madre superiora, María Beatriz, quien aseguró que por el momento se encuentran en buen estado. El ministerio de Salud de la provincia envió a ocho personas para que los asistieran y la directora médica y voluntaria del hogar, Adelaida Goldman, se mudó allí directamente junto a su hijo, que está a punto de graduarse de la carrera de medicina, para colaborar de forma permanente.

En el hogar, que no tiene subvención estatal, viven adultos y adultas mayores sin contención familiar, de bajos recursos económicos, que llegan, explicó Goldman, porque los trabajadores sociales de los centros de salud o la diócesis los encuentran en situación de vulnerabilidad. Tienen entre 84 y 97 años. Es decir que están dentro de los grupos de riesgo de covid-19.

De los 32 residentes, hay 25 que permanecen en el hogar y 7 fueron trasladados a Nazareth, habilitada el mes pasado para recibir adultos mayores con sospecha o diagnóstico confirmado.

En cuanto al personal, solo dos dieron negativo y están trabajando, y el resto se retiró a sus domicilios.

«Las monjitas, las que estaban asintomáticas siguen atendiendo a pesar de tener covid, a los abuelos, y las monjitas que estaban con síntomas (cuatro por el momento) están aisladas», precisó Goldman, que, además, es directora asociada del hospital Castro Rendón.

La doctora indicó que el ministerio envió personal de limpieza, de enfermería y cuidadoras. Como hay una situación de ocupación plena de camas de cuidados intensivos en la provincia -que desde el 29 de septiembre es del 99%- se está montando un espacio dentro del hogar para quienes necesiten asistencia con oxígeno.

«Hasta ahora están todos sin síntomas y los que tenían un poquito más de síntomas fueron trasladados -incluido el padre Juan Carlos- al hogar Nazareth», afirmó la médica.

Agradeció a las personas que se pusieron a disposición, pero remarcó que «la situación del cuidado de covid hace que nosotros no le podamos abrir la puerta a todos, porque sino nos convertimos en lugar de contagio».

El primer brote localizado en una residencia de larga estadía en la ciudad de Neuquén fue en La Consolata, en agosto pasado.