Turistas durmieron cuatro noches en la terminal de ómnibus de Bariloche

Más de 40 chilenos quedaron varados en Bariloche con el cierre del paso Cardenal Samoré y al menos, la mitad durmió durante cuatro noches en la terminal de ómnibus.

«Hay niños, bebés, gente mayor y nadie se ha acercado para darnos una respuesta o al menos, traernos un cobijo«, dijo María Mayorga, al tiempo que señalaba un bebé durmiendo sobre una pila de camperas y algunos bolsos.

Sonia Álvarez, una policía, se acercó a una mujer de 77 años que permanecía sentada en uno de los bancos de madera y le dijo: «Parece que hoy a las 14 los van a embarcar. ¿Quiere tomar algo calentito?«. La mujer hizo un gesto negativo con la cabeza y le regaló una sonrisa. No era para menos. Durante tres noches, durmió en ese mismo banco. La cuarta y última, lo hizo en un colchón que le consiguió la policía.

Lorena Rivas, de Puerto Montt, relató que el mismo viernes y el sábado los embarcaron con intención de cruzar a Chile. «No alcanzamos a llegar ni a Villa La Angostura. Tuvimos que regresar. No entiendo cómo se arriesgan a salir si el paso estaba cerrado», señaló.

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Los turistas se quejaron de la falta de información y de la falta asistencia por parte del municipio y del Consulado de Chile. También denunciaron «malos tratos» por parte del personal de la empresa de transporte y de los trabajadores de limpieza de la terminal de ómnibus.

«A la noche, ponían música fuerte, cerraban todo a los portazos, corrían bancos cuando acá había gente, niños, abuelos que intentaban dormir en el piso. Nos llegaron a decir: ‘chilenitos, mal agradecidos´. Estamos con los nervios de punta por no poder regresar y encima nos maltratan así», argumentó Alicia Bequer, de Castro.