Sonrisas y mentiras
La calidad de nuestra clase política deja -ya se sabe- bastante que desear.
Resulta ofensivo para la ciudadanía en general visualizar la publicidad gráfica donde la casi totalidad de los políticos en los afiches que se pegan aparecen con una sonrisa. Sería bueno saber, ¿de qué se ríen? Seguramente será de nosotros, los votantes.
Por otra parte no hay casi propuestas o las que existen son casi ridículas por su impracticabilidad; por ejemplo, alguien propuso elevar el salario mínimo a $ 100.000 sin saber cómo se podría financiar semejante incremento salarial, que idílicamente está bien pero en la realidad es imposible de financiar; otra propuso subir los impuestos de las personas jurídicas; ambas son locuras que se dicen en campaña porque los que trabajamos en relación de dependencia y las empresas estamos hartos de la carga tributaria…
No se dan cuenta que, de esta manera, nadie va a querer invertir en el país con leyes laborales e impositivas que tienen 50 años de atraso. Una locura para los que trabajamos y ya aportamos una enormidad en esta materia.
La pregunta que me hago es: ¿hasta cuándo los ciudadanos de este país van a soportar esto?
Solo les pido a los políticos… un poco de seriedad y respeto por los votantes. Gracias.
Daniel E. Gutiérrez
Contador Público – Auditor Interno Certificado -CIA
NEUQUÉN
La calidad de nuestra clase política deja -ya se sabe- bastante que desear.
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