Un sanatorio de Bariloche se suma al banco que guarda leche materna

Una clínica se convirtió en la primera institución privada en sumarse a la Red de Leche Humana de Río Negro, conformada por el Banco que funciona en el hospital López Lima de General Roca, los centros recolectores de leche cruda de Bariloche, Cipolletti, Villa Regina, Choele Choel, Lamarque, Catriel y Allen y los cuatro centros receptores.

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A partir de ahora, el Sanatorio San Carlos, ubicado en el kilómetro 1 de la avenida Bustillo al oeste de Bariloche, está en condiciones de donar leche de aquellas madres que tengan un excedente. A la vez, podrá solicitar y acceder al insumo en caso de que algún bebé así lo requiera.

El Banco de Leche se creó en septiembre de 2018 en General Roca, con donantes de esa localidad. Luego surgió la necesidad de avanzar en una red provincial para abastecer a las neonatologías. En 2021, en plena pandemia, se concretó el desafío de promover la lactancia materna y contar con un stock de leche humana destinada a los bebés internados en las unidades neonatales o en el área de terapia intensiva pediátrica.

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¿Cuál es la función de los centros de lactancia materna? El objetivo principal es que los lactantes internados reciban leche de su propia madre, pero además captar mamás que quieran donar leche cruda. Eso se friza y se envía al banco de leche en Roca donde se analiza y se pasteuriza en un procedimento que dura entre 6 y 8 horas. 

A la vez, pasan a ser centros de recepción de esa leche pasteurizada. “Pasteurizada la leche, se distribuye a las neonatologías de la provincia en General Roca, Cipolletti, Bariloche y ahora el sanatorio San Carlos”, sintetizó Noelia Loyola, coordinadora provincial de la Red de Leche Humana en Río Negro.

Aclaró que la leche se suministra solo bajo prescripción médica y se distribuye entre las Neonatologías a aquellos «niños neonatos de alto riesgo que no pueden recibir leche de su propia madre ya sea por una patología propia o por ciertas condiciones de sus madres». «No es que las mamás pueden retirar la leche pasteurizada y llevarla a su casa», advirtió Loyola.

La nutricionista Ana Lais De Nápoli, referente del Banco de Leche Humana de la Zona Andina y jefa del Centro de Lactancia del hospital Ramón Carrillo de Bariloche, explicó que “nos ha pasado de tener a bebés en neo cuyas mamás quedan en terapia intensiva. Estos bebés tienen derecho a recibir leche humana de banco ya que no tienen la posibilidad de recibir la de su propia madre«. 

Dijo que hay bebés que «no toleran la leche de fórmula y otros que por ciertas condiciones, como puede ser una cirugía intestinal, si la mamá no llega a poder extraerse leche, tienen indicación de leche humana pasteurizada. La leche humana es siempre mejor tolerada y brinda beneficios extra como el de mejorar el epitelio intestinal entre otras. Otro importante beneficio es el de prevenir la enteritis necrotizante (muy común en los prematuros extremos)”.

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Requisitos para acceder

La leche humana no se puede comercializar. Para acceder a ella, una institución debe cumplir ciertos requisitos: hay que formar parte de Red de Leche Humana y para eso, es necesario contar con un centro de lactancia materna.

“Ahora se suma el San Carlos y como referentes de la Zona Andina debemos supervisar ese centro para garantizar que las cosas se estén haciendo bien. A la vez, se genera un intercambio: ellos nos aportan leche humana de sus mamás cuando tienen excedente y están de acuerdo en donarlo. Cuando necesitan, se garantiza el stock”, especificó De Nápoli.

En algunas ocasiones, las mismas madres piden formar parte de la red. En otros casos, las profesionales detectan excedentes de leche y ofrecen la alternativa de sumarse. Hay centros con gran cantidad de madres en condiciones de donar leche y otros, con muy pocas. El número varía constantemente. Por eso se trabaja constantemente en captar donantes.

De Nápoli recalcó que no toda la leche puede ser utilizada y debe atravesar requisitos organolépticos y microbiológicos antes de ser pasteurizada: a veces, se descarta por acidez o suciedad.

El Banco de Leche de Río Negro es el séptimo en el país. Actualmente, hay 10 y cada uno abastece a su provincia.

«En el Banco de Leche de Roca, pasteurizamos dos veces a la semana. En cada proceso, se pasteurizan 35 frascos de 150 mililitros. Si bien la leche tiene un vencimiento de seis meses, siempre la distribuimos antes», indicó Loyola.

Por qué la leche materna

Laura Lizazzu, médica de Neonatología del sanatorio San Carlos, advirtió una fuerte necesidad para alimentar a los bebés con leche humana. “Para los prematuros es una diferencia enorme porque disminuye la mortalidad, el riesgo de internación, de infecciones y complicaciones”, planteó.

El primer objetivo, acotó, es que el bebé se pueda alimentar con la leche de su propia mamá. En ese sentido, se la acompaña y se la asesora. “Sucede que hay bebés que pasan semanas o meses internados. Eso dificulta la lactancia. Hay mamás que no pueden amamantar o bien están internadas. Tener un stock de leche humana nos pemite alimentarlo hasta que su mamá esté en condiciones de amantarlo directamente”, resumió Lizazzu.

Reconoció que tras una internación en Neonatología, hay muchas madres que se extraen leche que queda almacenada y entonces, deciden donarla. “La mayoría de las mamás que atraviesan esta situación se solidarizan con otros bebés que puedan pasar por lo mismo y acceden a donar los frasquitos”, dijo.

El convenio de coparticipación con el sanatorio San Carlos incluye la logística. Si bien el hospital implementó un traslado mensual de leche a Roca, la idea es que el sanatorio colabore en caso de tener que aumentar la cantidad de viajes a través de la disponibilidad de una ambulancia.

El instagram del Centro de Lactancia aporta información para las madres que quieran donar leche.