Un pueblo pequeño con grandes sueños: la decisión de último momento que le cambió la vida a los estudiantes de Los Miches
Alrededor de 50 estudiantes lucharon por tener un edificio propio para su escuela secundaria mientras que estudiaban en salones prestados que anticipaban un futuro incierto. Apareció un espacio que estaba destinado al Concejo Deliberante, pero una decisión cambió su rumbo.
Son alrededor de 50 los estudiantes que asisten al CPEM 97. Foto: Gentileza.
A 482 km de Neuquén y al pie de la Cordillera del Viento, alrededor de 50 alumnos pelean por un futuro mejor en uno de los pueblos más pequeños del norte neuquino, Los Miches. En el 2022 nació el CPEM 97, el primer secundario que funcionó en salones prestados y que, sin un espacio propio, solo veía un futuro incierto. Hasta que una decisión cambió el rumbo de un edificio que estaba destinado a un Concejo Deliberante. Este martes, los estudiantes fueron protagonistas de la inauguración de su propio secundario, un espacio que renace y que les cambió la vida para siempre.
Los Miches es uno de los pueblos más pequeños de la provincia, con los paisajes más bonitos e inconmensurables del norte de Neuquén. Allí está establecida la comunidad mapuche Antiñir- Pilquiñan.
Durante décadas, la educación de sus jóvenes fue una historia de sacrificio y resiliencia, con los estudiantes obligados a emprender largos viajes a pueblos vecinos como Andacollo y Las Ovejas para continuar su educación secundaria.
Hasta que en 2022 un faro de esperanza iluminó el pueblo y nació el CPEM 97, una escuela de enseñanza media que funcionó en salones prestados. Desde su fundación, el colegio no tuvo las condiciones mínimas para desarrollarse.
El director Matildo Andrés indicó en esa oportunidad «Arrancamos con 11 alumnos, pero rápidamente empezaba a sumar esa matrícula y nos encontramos con un número de 50, pero no ha cambiado en nada nuestro espacio físico«.
A la par de la comunidad educativa de 65 personas que transitaba el ciclo lectivo en condiciones mínimas, comenzó a levantarse un edificio para un Concejo Deliberante. Sin embargo, una decisión lo cambió todo.
En un pueblo donde la tranquilidad y el silencio se adueñan de cada rincón, el grito desesperado de una comunidad que sueña por un futuro para sus estudiantes se hizo escuchar.
Durante una visita del gobernador Rolando Figueroa, el intendente de la localidad, Víctor Ortega, expresó las expectativas de la inauguración del recinto municipal, no obstante, la idea de un nuevo edificio para el municipio, sin la existencia aun un establecimiento secundario, parecía no encajar.
“Acá tiene que funcionar la escuela”, afirmó Figueroa. Esa frase fue un antes y un después para los chicos y chicas de Los Miches, que ahora ven lejanas las condiciones abarrotadas del pasado.
Este martes, los alumnos no solo izaron la bandera argentina y la de Neuquén por primera vez afuera del CPEM 97, sino también la de la educación.
“Verlos en la plaza, tenerlos en casa, en verdad reconforta”, reflexionaron algunos durante la inauguración, en la que abundaron las emociones. Se montó una fiesta popular sabiendo que los jóvenes tendrán la comodidad y la satisfacción de estudiar en su pueblo.
El intendente anunció que cuando la escuela crezca y se mude a un edificio más grande, el que ocupa ahora se destinará a clases virtuales y quizá hasta presenciales de enseñanza superior o terciaria. Y el director de la escuela, Matildo Andrés manifestó: “cuando se quiere se puede”.
“Cuando se les abandona la enseñanza a los chicos, en realidad los estamos perjudicando a ellos, porque no le estamos dando herramientas para ser libres de verdad. Siempre tenemos que brindar las oportunidades”, cerró el gobernador.
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