Un año sin ingreso de nuevos investigadores al Conicet
El organismo tiene frenadas alrededor de 850 altas de personas con concursos aprobados desde hace un año. "Muchos equipos de investigación se están desmembrando y muchas líneas de investigación están frenadas o truncas”, plantearon desde Bariloche y Neuquén.
“Muchos investigadores están buscando otras alternativas laborales en el país o comienzan a ver un horizonte de posibilidad en la llamada ‘Fuga de cerebros’”. De esta forma, Verónica Trpin, investigadora independiente del Conicet y directora del Ipehcs (Instituto Patagónico de Estudios en Humanidades y Ciencias Sociales) en Neuquén, se refirió a las 850 personas en todo el país que aguardan desde hace un año el alta para ingresar a la carrera de investigador del organismo nacional.
Exactamente un año atrás, se publicaban los resultados de la convocatoria a la carrera de investigador de Conicet, tras un riguroso proceso de evaluación por especialistas que dura seis meses. En el período de evaluación, se analizaron los antecedentes y proyectos presentados por los postulantes que debían tener, al menos, un título de doctorado y una cantidad importante de publicaciones científicas o papers, entre otras exigencias.
Desde ese día, 850 personas de 23 jurisdicciones aguardan el alta del cargo como investigadores del organismo. Hasta ahora, sin noticias.
De Patagonia, hubo 57 ingresantes a la carrera de investigador del Conicet, de los cuales 20 corresponden a Río Negro, 12 a Neuquén, 12 a Chubut, 1 a Santa Cruz, 9 a Tierra del Fuego y 3 a La Pampa. De este total, 37 ya cuentan con el trámite aprobado.
La respuesta es siempre la misma: los ingresos a Conicet se encuentran frenados por “una cuestión presupuestaria”.
“Hace un año 850 personas estamos a la espera del ingreso a carrera, luego de haber ganado un concurso público, que es uno de los más exigentes del estado. Estuvimos más de seis meses en evaluación por distintas comisiones de especialistas, quedamos seleccionados para ingresar a la planta permanente. En una situación normal, ese trámite tarda unos meses y uno ya ingresa a trabajar”, resaltó Florencia Yaniello, doctora en Comunicación, becaria posdoctoral del Instituto de Investigaciones en Diversidad Cultural y Procesos de Cambio de Bariloche e ingresante a la carrera de Investigador Científico. Está a la espera del alta desde hace un año.
La espera del alta que lleva un año fue considerada como “una decisión política”: “Es una decisión del organismo no dar ingresos de nuevas altas. Es algo inédito: hubo en otros momentos pocos ingresos o recortes, pero este año lo que nos están diciendo es que no va a haber ingresos y somos un montón de personas en esa espera. Estamos en suspenso”.
Yaniello mencionó que la mayoría de los investigadores logró una prórroga de las becas aunque, mes a mes, deben consultar si la seguirán cobrando. “Por otro lado -señaló-, mucha gente que se presentó al concurso sin ser parte del organismo está sin cobrar desde hace un año. Trabajan de otras cosas o buscan un empleo. Esto implica que hay muchos equipos de investigación que se están desmembrando, muchas líneas de investigación que están frenadas o truncas porque obviamente no está ingresando nuevo personal”.
En este sentido, Joaquín Perren, director del Centro Científico Tecnológico Patagonia Confluencia en Neuquén, acotó que “el compromiso de Conicet con la Jefatura de Gabinete es no aumentar la cantidad de empleados de planta permanente, para decirlo de un modo sencillo”.
“Tener las becas postdoctorales prorrogadas no aporta jubilación, no dejas de ser un trabajador flexibilizado. Pero de alguna forma, los ingresos están asegurados en términos monetarios. Para aquellos que no están dentro del sistema, la cosa es más complicada. Ahí veo la intención de ganarles por cansancio”, opinó el investigador del Conicet.
Trpin recalcó que quienes aguardan el alta a la carrera de investigador “es gente que ya se doctoró. Son jóvenes investigadores, muchos de los cuales han tenido experiencias con becas doctorales y concursaron para ingresar a la carrera. Pero esas altas están paradas lo que genera un fuerte desaliento porque no tienen la certeza acerca de la continuidad en el organismo de ciencia y técnica”.
“Hay gente que tuvo que buscar otras alternativas laborales a la espera del alta. Esto repercute no solo en la incertidumbre y la angustia de no saber qué va a pasar sino cómo seguir apostando a la formación de los jóvenes en diversas áreas de conocimiento en Conicet. Esto desalienta el fortalecimiento de este semillero que es la base de jóvenes que están altamente calificados”, concluyó la investigadora neuquina.
No más becas posdoctorales
Por otro lado, el 27 de diciembre, el directorio de Conicet anunció que no otorgaría más becas postdoctorales extraordinarias. “A nivel profesional, luego de siete años de carrera de grado, cinco de doctorado y tres de postdoctorado, de haber sido evaluados académica y profesionalmente por tres comisiones y de haber ganado uno de los concursos públicos más exigentes del Estado Nacional, nos encontramos en un limbo sin saber que sucederá con nuestro futuro”, manifestaron desde el Colectivo de Ingresantes Conicet.
Explicaron que, de esta forma, siguen siendo «becarios» lo que «impide presentarse en otras oportunidades laborales y tener los derechos mínimos de cualquier trabajador ya que solo al efectivizarse el nombramiento, Conicet paga las cargas sociales, aportes jubilatorios, aguinaldo».
Por otro lado, resaltan que las consecuencias para el desarrollo nacional también son gravísimas: Recordaron que el cierre de los ingresos a carrera del investigador está acompañado de 130 despidos de personal administrativo en el organismo, «un recorte feroz en el número de becas doctorales y postdoctorales, el congelamiento de los ingresos y la suspensión del financiamiento a los proyectos de investigación, situación agravada por la caída del salario real de un 26% entre noviembre 2023 y junio 2024”.
Desde el Colectivo de Ingresantes sostienen que la ausencia de inversión frenará líneas de investigación reconocidas mundialmente y el desarrollo de tecnologías no solamente claves para el crecimiento del país, sino fuente de ingresos de divisas para la economía nacional.
“Todos los financiamientos para proyectos de investigación están parados”, concluyó Trpin.
Comentarios