Travel Rock respondió a las quejas sobre los viajes de egresados

“Está plagado de videos dando vueltas que son falsos -tanto nuestros como de la competencia-. Y es lamentable porque daña a la industria. Lo cierto es que la gente vuelve feliz”. Michael Casavilla, responsable de prensa de Travel Rock, respondió a las quejas por parte de algunos contingentes sobre las condiciones del viaje de egresados en Bariloche.

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Reconoció que días atrás, se generó un problema con la cisterna de un hotel y eso los obligó a reacomodar pasajeros y reprogramar algunos viajes de egresados. “El diagrama del viaje de egresados es complejo. Es un rompecabezas fino que no te permite acomodar las actividades como si fuera turismo individual”, indicó.

“Al tener un hotel menos -continuó-, no podíamos hacer entrada a Bariloche. Y eso nos obligó a reprogramar todos los servicios. Por eso se reprogramó el viaje del colegio de Formosa (ya está acordado con ellos) y los chicos de Misiones se quedaron dos días más en Bariloche”.

Respecto a las quejas por el servicio de salud durante el viaje, señaló que “tal como establece el contrato, contratan asistencia al viajero”. “Los médicos no son nuestros. Los aporta Assist Card. Se culpa a la empresa porque se les da paracetamol a los chicos, pero no es una decisión nuestra”, advirtió.

Sobre las quejas de un contingente de Formosa por las cancelaciones del viaje y el cambio de aerolíneas, Casavilla explicó que el contrato establece que los chicos pueden viajar por cualquier línea aérea. Se trata de garantizar el vuelo, dijo, sin importar la empresa.

Recalcó que desde fines de junio, unos 6000 estudiantes ya viajaron a Bariloche y la mayoría no tuvo ningún inconveniente. La firma traerá alrededor de 60 mil jóvenes en todo este año.

En diálogo con RÍO NEGRO, Lorena Lavascsk, abogada de la Defensoría del Turista de Buenos Aires, aseguró que reciben constantes denuncias vinculadas a Travel Rock. En muchos casos, las quejas son por el atraso en el pago de las cuotas de los viajes que lleva a que los chicos queden en una lista de espera hasta el momento del viaje. Consideró que las cuotas luego duplican el valor y consideró que las cláusulas de los contratos so «abusivas».

“Son cláusulas comunes al turismo estudiantil”, expresó Casavilla y agregó: “La única manera de saber qué pasajeros viajan y quiénes no es con el pago de las cuotas. Algunos pagan seis, siete cuotas y dejan de pagar porque deciden no viajar. Es difícil diagramar el viaje”.

Dijo que cuando el pasajero se atrasa más de 30 días en el pago de cuotas y no avisa que tuvo un problema -para adaptar el plan de pagos-, la empresa considera que no viaja y lo da de baja. “Si ese pasajero se quiere reincorporar y hay lugar, lo hace con una tarifa actualizada. A pasajeros que abonan cuotas se les respeta el precio del contrato. Es la única industria que mantiene los precios congelados un año antes de que los chicos viajen”, especificó.