Tiene 12 años y encontró un dinosaurio en el patio de la casa de su abuelo en Añelo: «Vi una costilla»

Muchas son las anécdotas que una persona puede cosechar en la adolescencia y que son dignas de contar por el resto de la vida. Pero pocas como las que vivió hace unos días, Tiziano Muñoz, un chico de 12 años: encontrar un dinosaurio en el patio de la casa de su abuelo.

La fantástica historia comenzó hace casi un mes cuando Tiziano jugaba en el pie de la barda que da al fondo de la parcela donde vive su abuelo paterno. Luego de subir con su papá (quien se crio en la propiedad) y pasar un tiempo disfrutando de la vista de toda la localidad, al bajar se topó con «algo» que sobresalía del relieve arcilloso que caracteriza el suelo añelense.

«Tizi» acompañado por su mamá Natalí charló con Diario RÍO NEGRO, y relató la inolvidable experiencia que tomó especial relevancia este jueves 30, cuando los paleontólogos del Museo del Desierto Patagónico de Añelo trabajaron en las piezas fósiles.

«Estoy impactado», comenzó diciendo el adolescente al recordar como sucedió todo aquél día en el que decidió bajar de la barda por un lado que no era el tradicional.

«Ese día mi papá me dijo que baje por la huella que está marcada, pero decidí bajar con mucho cuidado por otro sector, en ese momento, pisando lentamente vi una costilla, o lo que creí que era una costilla», contó el joven que estudia en Villa Manzano.

«Luego di aviso a mi papá, quien se acercó para ver y también se vio sorprendido por lo que sobresalía de la tierra», relató. «Le pedimos a mi mamá que suba con el celular y saque fotos», recodó.

Con las imágenes y los detalles de la zona del hallazgo, decidieron en familia averiguar cuál era el procedimiento correcto a la hora de encontrar un fósil. «Entonces dimos aviso al museo de Añelo», explicó y desde allí siguieron todos los pasos que los profesionales les sugirieron, con el fin de preservar «lo encontrado».

Natalí, su mamá, remarcó que lo que se veía era realmente muy poco y reconoció que su hijo tiene «un gran poder de observación», ya que su esposo y suegro viven allí desde hace muchos años y jamás vieron algo así.

Tiziano recibió el reconocimiento de científicos y del intendente Fernando Banderet que estuvieron en el lugar y destacaron el accionar de la familia, procurando preservar el hallazgo para que pueda ser apreciado por todos los vecinos y visitantes de Añelo en el museo local.

El personal del Museo del Desierto Patagónico de Añelo, institución que cuenta con la coordinación de los paleontólogos de la Universidad del Comahue y la Municipalidad de Añelo, visitó el punto de hallazgo que está a escasos 600 metros de la institución científica.

Finalmente los expertos determinaron que no era una costilla, sino las piezas de una pierna de un gigante herbívoro.

El doctor Juan Porfiri, paleontólogo del museo charló con este medio y catalogó el descubrimiento como «sorprendente». Junto a la directora Domenica de Los Santos trabajaron en los fósiles.

«Lo que Tizi encontró era parte de un fémur, que completo midió 1.50 metros», detalló y explicó que se realizó un primer procedimiento de encapsulado con yeso y que al momento de remover la pieza, aparecieron otras dos piezas de la pierna. «Seguimos sorprendidos porque no sabemos cuánto más encontraremos», dijo el paleontólogo y adelantó que si bien aún falta mucho por hacer hasta que los huesos lleguen al laboratorio se puede presumir que el material fosilizado «era de un herbívoro gigante del tipo titanosaurio».

Las piezas encapsuladas serán enviadas al museo donde se albergan todos los fósiles de la zona. Allí, se realizará luego un proceso de curaduría y posterior análisis comparativo con otros animales encontrados en Vaca Muerta.

Añelo sumó así un descubrimiento histórico y Tiziano una vivencia que marcará su vida.