Terminaron la obra en el río Neuquén que busca mejorar el servicio de agua para Cutral Co y Huincul
Se construyó un azud que busca contener mayor cantidad de agua para que los equipos de bombeo puedan captarla con más facilidad.
Los trabajos de construcción de un azud o muro sobre el río Neuquén que se hicieron ante la emergencia hídrica, ya concluyeron. Se busca reconducir el cauce para garantizar que los equipos de bombeo puedan tener el caudal suficiente para extraer el líquido y después potabilizarlo. Estas tareas se realizaron en la zona de la meseta Buena Esperanza, donde está la planta del EPAS que envía el agua potable a la comarca petrolera.
Se denomina azud o muro de contención que permite reconducir el agua en este caso del río Neuquén y se ejecutó con los fondos aportados por los municipios de Cutral Co y Plaza Huincul, junto a la empresa YPF. El principal objetivo es que los equipos de bombeo que están en la toma del río Neuquén cuenten con el caudal suficiente como para succionar el líquido y luego enviar a la planta de potabilización, en la misma meseta.
En épocas donde el caudal del río Neuquén tiene una considerable baja las bombas no logran captar el líquido, donde están instaladas. Es por esto que se busca minimizar el impacto de la sequía. Una vez que el agua está potabilizada, se envía por los ductos de 33 kilómetros hasta la copa o reservorio que el EPAS tiene en Cutral Co, y desde allí se entrega a los municipios que son los encargados de la distribución en las respectivas ciudades.
El organismo provincial informó que el azud sobre el río Neuquén elevó el nivel de agua del cauce y esa tarea demandó unos diez días. «La supervisión de los trabajos fue llevado a cabo por parte del ente», se indicó. «La realización de este azud se llevó a cabo con la intención de aumentar los caudales de agua para potabilizar y suministrar a la comarca petrolera, si el río mantiene estos niveles», se aclaró. En el caso de que baje aún más, «se deberán realizar tareas adicionales que permitan generar el volumen de agua necesaria para las bombas impulsoras».
Los trabajos de construcción de un azud o muro sobre el río Neuquén que se hicieron ante la emergencia hídrica, ya concluyeron. Se busca reconducir el cauce para garantizar que los equipos de bombeo puedan tener el caudal suficiente para extraer el líquido y después potabilizarlo. Estas tareas se realizaron en la zona de la meseta Buena Esperanza, donde está la planta del EPAS que envía el agua potable a la comarca petrolera.
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