Salud al límite: por falta de descartables y reactivos, restringen análisis de laboratorio en Roca
La crisis sanitaria en el hospital de Roca obliga a suspender análisis de sangre y pruebas de laboratorio, incluso en los centros de salud barriales. Solo se atienden urgencias y grupos vulnerables.
No se realizarán extracciones de sangre en centros de salud barriales en Roca, hasta nuevo aviso. Foto: ilustrativa (archivo)
Hace dos días jefes de servicio del hospital López Lima de Roca elevaron una nota pidiendo a la Legislatura Provincial que se declare la emergencia sanitaria, basada en la ya insostenible falta de insumos, medicamentos. Horas después, desde el Ministerio de Salud salieron a explicar que hicieron compras de medicamentos por 21.000 millones y 3.000 millones de pesos en pagos a proveedores.
Las necesidades más urgentes no solo pasan por los medicamentos, sino que también se denunció públicamente la falta de insumos. Entre los diez sectores firmantes, se encuentra el área de Laboratorio, uno de los más demandados y de los que más carencias padece por falta de material descartable, tubos de extracción y reactivos para llevar adelante los análisis de cientos de pacientes por día.
“A partir del 19 de febrero y hasta nuevo aviso se realizan solo laboratorios de urgencia y emergencias, embarazadas, oncológicos y renales”, se bajó la directiva en una nota que contiene una nueva disposición transitoria para el hospital y que dieron a conocer trabajadores de Salud a Diario RIO NEGRO.
Otra novedad es que no habrá extracciones de sangre en los centros de salud barriales (CAPS) hasta que se regularice la situación, lo cual perjudica a cientos de pacientes crónicos y aquellos que no pueden trasladarse hasta el hospital.
“En laboratorio si trabajamos normalmente tenemos alrededor de 300 pacientes por día”, explico una profesional consultada. Necesitan material descartable según pedido médico, u en algunos casos son hasta tres tubos diferentes por paciente.
Varios estudios quedaron restringidas solo a los pacientes que están internados o a algunas patologías y afecciones graves emergentes en las que corre peligro la vida. La prioridad es para ellos, y todo lo programado deberá esperar; inclusive los pacientes ambulatorios que no involucren una patología aguda.
Basta con concurrir al laboratorio para que el usuario de salud pública reciba la noticia: si es una urgencia se lo atiende, si no está en ninguno de los grupos detallados le explican que no se están realizando extracciones. Todo lo programado se reprograma.
Día a día, los trabajadores de salud contabilizan, evalúan y planifican con cuanto material cuentan para trabajar. «Para nosotros es muy dificil trabajar asi”, comentó la trabajadora del laboratorio.
“Muchas veces no tenemos con qué y buscamos la solución de alguna manera le ponemos la mejor, porque detrás de ese análisis hay una persona que nos necesita, pero otras veces no está a nuestro alcance, lamentablemente«, sentenció.
No se sabe a ciencia cierta cuándo se va a regularizar la disponibilidad de los recursos, limitados por el momento. Hasta ese entonces, regirán estos criterios.
Inversión del Ministerio de Salud de Río Negro
El comunicado oficial del Ministerio de Salud de Río Negro emitido el martes 20 de febrero destaca la inversión de «más de 21.000 millones de pesos» para medicamentos, insumos médicos y liquidación de deudas pendientes: «Se cancelaron 3.000 millones de pesos«, en ese sentido.
En el comunicado se detalla que “se priorizó la compra de una amplia gama de medicamentos esenciales, incluyendo medicación Fibroquística; medicamentos oncológicos, medicación para crónicos, medicamentos de altos costos, descartables, insulinas, reactivos para toxoplasmosis y para diagnóstico de Chagas, soportes nutricionales, elementos de protección personal, leche deslactosada, fortificador de leche humana, entre tantos otros”.
Finalmente, desde la cartera de Salud anunciaron un aumento “significativo” en los fondos asignados a los hospitales de la provincia. “Estos incrementos eran necesarios dado que los montos asignados permanecían sin cambios desde 2019-2020, lo que los hacía obsoletos en relación con los costos actuales”, puntualizaron.
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