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Ruta 23: entre los arreglos y el temor por el turismo en una joya de Neuquén

Al igual que la 13, estas rutas provinciales preocupan a los habitantes y turistas, sobre el estado de las carreteras y las preocupaciones asociadas. También se supo cómo avanzan las obras.  

La ruta provincial 23 de Neuquén, extensa vía de 188 kilómetros, lleva a localidades como Villa Pehuenia y Aluminé, con escenarios encantadores de paisajes, lagos y playas que cautivan. Sin embargo, el deterioro del camino hace que sea una odisea llegar a esos destinos. Por esto, el año pasado se comenzaron trabajos de construcción y mejoras tanto en esa ruta como en la 13, un recorrido alternativo. A pesar de estos esfuerzos, tanto los viajeros como los habitantes locales expresaron su inquietud por el impacto negativo que el estado de las carreteras genera en el turismo y en la calidad de vida de los residentes.

Villa Pehuenia es un paraíso, vendido y conocido como la capital de la gastronomía, donde se realiza anualmente el festival de Chef Patagónico. Propone ciento de actividades para hacer donde los lagos Aluminé y Moquehue son los principales encargados de sorprender y sus playas los motivos de tu disfrute diario. 

Sin embargo, ambas rutas que llevan a la ciudad cordillerana se encuentran en mal estado, y por esto comenzaron a ejecutarse obras cuyo propósito es la conectividad y el incentivo al turismo.

“Para llegar a nuestro paraíso tenés que pasar por un infierno todavía”, manifestó a Diario RÍO NEGRO el presidente de la Asociación de bomberos voluntarios de la ciudad al pie de los Andes patagónicos, Lorenzo Lorente. “Acá vas a tener la mejor gastronomía, vas a tener lago, arroyo, montaña, la vas a pasar bárbaro, aire puro, pero tenés que saber que para llegar acá tenés que venir con extrema precaución», adelantó.  

Villa Pehuenia cautiva con su paisaje y oferta gastronomía. Foto: Archivo Alejandro Carnevale.

“Está deplorable, los comentarios más comunes son que está rota, hay serruchos o las piedras se asoman”, agregó al testimonio Gastón, un taxista de la localidad. “No tenemos ninguna buena ruta para entrar, pero recomendamos armarse de paciencia y tardar lo que tengamos que tardar”, agregó.

La Ruta 13, otro de los caminos que toman los visitantes para llegar a Villa Pehuenia, también fue criticada por neuquinos que viajan habitualmente a la localidad. Expresaron su preocupación por su deterioro y comentaron “no queremos que baje el turismo por el estado del camino”. “Hay algunos tramos de ripio y otros donde el vehículo patina un poco, así que hay que venir con cuidado”, añadieron.  

Por su parte, el presidente de la Asociación de Bomberos expresó que teme que los turistas prefieran viajar a otras localidades cordilleranas por cómo se encuentran las rutas. “Si tenés la opción de ir por asfalto a otro lado, vas por asfalto y no arriesgas mucho”, lamentó. 

Villa Pehuenia no es la única ciudad afectada, es que cerca está Aluminé, desde donde viajeros frecuentes indicaron que la afluencia turística aumentaría si las rutas fueran reparadas. «Mucha gente vendría al igual que a Pehuenia, si arreglaran las rutas podés venir a pasar el día”, relataron.  

A pesar de la preocupación por el estado de las rutas, los entrevistados aseguraron que observan maquinaria en acción para mejorar las vías, y aunque se espera que esto genere beneficios a largo plazo, actualmente continúan experimentando las dificultades del camino.

“Por más que todas esas empresas estén trabajando en el futuro asfalto tan importante y esperado por nosotros, va a llevar tiempo y seguimos sufriendo ese problema”, manifestó Lorente. Indicó que recorriendo la ruta 13 “están rellenando, trabajando sí se está trabajando, aunque no con la celeridad que nosotros quisiéramos”, comentó.  

El antropólogo Fernando Toth, de la empresa dedicada a la obra en uno de los tramos de la Ruta 23, destacó la complejidad histórica de la vía, principalmente debido a la presencia de piedras. “Para hacer un mantenimiento profundo hay que estar haciendo aporte de material todo el tiempo”, señaló.  

Las rutas son claves para unir el Alto Valle con la región Sur. Foto Archivo.

En octubre del 2023 la empresa comenzó con los trabajos abocados al tramo comprendido entre Puesto Jara y el empalme con la ruta provincial 13. «Cuando recibimos el camino, estaba maltratado porque además tiene mucho tránsito y a veces cuando se hace el mantenimiento, las velocidades de los transeúntes aumentan y vuelve a perjudicar la ruta”, relató. 

El plazo de la obra de la Ruta 23 en el tramo desde la Ruta 13 hasta el Puesto Jara es de 18 meses y ya cuenta con un 8% de avance.

Esta ruta tiene varios frentes de obra en distintos tramos. Según informó Vialidad Provincial, todos están en ejecución, excepto el tramo de Aluminé, que el organismo estaba realizando por administración. Informaron que pronto se reanudarán esas tareas, mientras que se desarrollan las demás.

El mes pasado, el gobernador Rolando Figueroa inauguró el tramo que une el puente sobre el río Aluminé a la altura de Pilo Lil y el puente sobre el río Malleo.

En cambio, lo último que se supo de la Ruta 13 fue en octubre. En esa oportunidad, el organismo indicó: «Nuestro equipo de conservación está trabajando arduamente para mejorar la calidad de la ruta provincial 13, específicamente en el tramo Primeros Pinos-Litran».


Ruta 23 y 13: polémica por los reclamos


En el transcurso del año pasado, bomberos voluntarios y conductores de ambulancias en las localidades no han dejado de expresar la urgencia de declarar la emergencia vial, focalizando su preocupación principalmente en la Ruta 23. En redes sociales, usuarios han compartido impactantes imágenes de tramos extensos que deberían estar pavimentados, pero que están deteriorados.

Desde el hospital de Aluminé, fue el chofer Andrés Salas quien alertó sobre la necesidad de circular con extrema precaución, describiendo las difíciles experiencias tanto por el personal sanitario como por los propios pacientes.

En Villa Pehuenia, el presidente de la asociación de bomberos voluntarios, Lorenzo Lorente, difundió imágenes del estado de las rutas también, lo que generó un conflicto con Vialidad Provincial, que involucró denuncias y cartas a documento.  

Lorente reiteró el reclamo e indicó que el estado de las rutas actualmente “pone en riesgo, no solamente los bienes, sino también la vida de nuestros bomberos que van a salvar vidas por esas rutas”.  

El presidente de la asociación mostró está imagen en redes sociales. Foto: Facebook

El presidente de la asociación también indicó que viajando por la ruta 13, “es un infierno”. “Los parches que realizó la anterior gestión, ya están destruidos”, aseguró y comentó que una de las razones es la presión que hubo de turistas y vecinos. 


Ruta 23: el propósito social y turístico de los arreglos en la ruta  


Desde la empresa Perfil SRL encargada del tramo 2 de la ruta que va desde la Ruta 13 hasta el Puesto Jara habló acerca de la parte social de la obra. Fernando Toth, el antropólogo a cargo, contó que son 22 kilómetros de obra. “En este caso hice el diseño del plan de comunicación, del plan de gestión social y el entorno, también en comunicación con las comunidades de frentistas, con quienes tenemos un diálogo constante”, indicó.  

Debido a esto, el antropólogo destacó que se comenzó a trabajar con las comunidades varios meses antes de iniciar la obra. «Mejora mi trabajo enormemente tener un panorama del territorio antes de que comience la obra, para hablar con los actores que viven ahí», señaló.

Además, Toth destacó que la comunicación constituye un elemento fundamental dentro de la estrategia de interacción con la comunidad. Por este motivo, previo al inicio de las obras y tras conocer las denuncias de los residentes sobre el deterioro del camino, “lo tuvimos en consideración y todos fueron invitados a nuestra reunión informativa inicial”, señaló.

La primera reunión con distintas fuerzas sociales. Foto: Facebook

“Ahí invitamos a todas las fuerzas sociales de la zona, incluido también al cuerpo de bomberos de Aluminé y de Pehuenia”, mencionó el antropólogo.

El propósito general del proyecto es la conectividad, comunicó Toth, lo que implica al turismo también. Este se fundamenta en tres ejes:

El turismo: en lo que se refiere a las actividades de invierno, la ruta estudiada es el único paso hacia Villa Pehuenia y Batea Mahuida (donde funciona el parque invernal). En esa época también es el paso para quienes desean cruzar a Chile por Paso Icalma. 

El segundo es el transporte: permite el recorrido hacia y desde Chile de camiones, como así también la circulación de los fletes de provisión general para los habitantes de Villa Pehuenia, Moquehue, Kilca, Quilachanquil, comunidad Catalán/Puel y distintos parajes ubicados en la zona.

Además, se presenta como una de las vías que conectan el sur de la provincial, y que además se relaciona en travesía con los pasos fronterizos Icalma y Pino Hachado.

Por último, emergencias sanitarias: que permite el acceso de las localidades y parajes citados al único hospital zonal, ubicado en Aluminé.


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