Por qué hay más roedores en Bariloche

En las últimas semanas, con la llegada del frío, comenzaron a verse roedores en varias escuelas y viviendas en diversos barrios de Bariloche.

«Lo que se ve, a través de las consultas en la oficina, es que en la ciudad hay muchos roedores. La gente nos manda fotos y son lauchas comunes; no ratones silvestres», advirtió Valeria Rossi, del área Salud Ambiental de la Zona Andina.

Insistió en que no hay «datos técnicos sobre la cantidad, pero al haber más actividades humanas, tanto turismo y tanta basura, la ciudad colapsa y aumenta la cantidad de roedores urbanos».

La veterinaria explicó que los roedores tienen dos picos de reproducción, en otoño y primavera: «Al empezar el frío, se movilizan más, en busca de refugio y comida. Por eso, se pueden acercar más a los lugares habitados», dijo.

Fernado Clobaz, de la empresa de fumigación que lleva su nombre, reconoció que hoy tienen «más trabajo que lo normal» y que la novedad es que están encontrando ratas pardas, grandes, que antes no había.

«Antes, esta rata grande estaba en lugares bien específicos como la calle 9 de Julio, Onelli, Tiscornia o en el Mallín porque debajo hay caños que van a parar al lago. Pero ahora están por todos lados y lejos de las fuentes de agua. ¿Por qué? No lo sé. En Dina Huapi jamás hubo: hoy acudimos por algunos casos. También encontramos en Colonia Suiza», reconoció Clobaz.

Los describió como animales «territoriales» que incluso, matan lauchas. «Llamativamente cuando agarramos ratas son todas alfa, las mejores de la colonia. ¿Cómo te das cuenta? Porque se pelean entre ellas. Las más débiles no tienen pelos en la trompa y suelen estar amputadas. No es algo normal«, señaló.

¿Por qué abundan los roedores en esta época? Cesar Méndez, de Nativa Fumigaciones, indicó que estos animales «están presentes los 365 días del año en las zonas urbanizadas. Pero son mamíferos y como tales, al entrar en épocas de bajas temperaturas, les afecta«.

Comentó que solo en una mañana, su empresa recibió 5 llamados para solicitar el servicio. Recordó que las condiciones de orden y limpieza de una vivienda determinan la presencia de roedores. «Hablamos de un triángulo de la vida: refugio, alimentos y una fuente de hidratación. Los lugares que suministran esto, sin quererlo, garantizan el asentamiento», aseguró.

Méndez comentó que en la ciudad abundan dos tipos de roedores. «La lauchita es la más común, pero el problema es cuando hay asentamiento de rattus rattus (el ratón negro) que le hace frente a los gatos. Es muy destructivo. Puede romper un caño de agua o anidar en el techo», afirmó.

El veterinario Rodrigo Bustamante, del área Epidemiología del hospital Ramón Carrillo, recalcó que en esta época los roedores buscan comida. «Por eso, se mueven más. Son ratas de ciudad. El colilargo, que contagia hantavirus, está en el bosque. Puede haber en alguna casa que esté metida en el bosque», sostuvo y advirtió que «las medidas de prevención siempre son las mismas: limpiar alrededor de una casa, no juntar basura y tapar los ingresos a las casas».

A su vez, Clobaz recomendó guardar el alimento para las mascotas y colocar burletes.