Los beneficios de los e-books: consejos para adaptarse a este tipo de lectura

Los ebooks y los audiolibros son la versión digital de libros para que se puedan leer en una computadora, tablet, teléfono celular o dispositivos creados especialmente para este uso. La diferencia entre un libro físico y un libro electrónico es la misma que una carta a un correo electrónico.

Ambos tienen el mismo propósito, pero uno se realiza digitalmente mientras que el otro se basa en impresiones y hojas. Los libros electrónicos ya son parte de la realidad y, si bien son más ventajosos para el bolsillo y el medio ambiente, a muchos todavía les cuesta adaptarse a este tipo de lectura.

¿Por qué valen la pena?

Precio – En general, los libros electrónicos cuestan menos que los libros físicos, ya que no hay costos de impresión ni de envío. A veces la diferencia de precio puede llegar a ser del 50%.

Inmediatez – Es posible comprar un libro electrónico y empezar a leerlo enseguida. Esto facilita el proceso de compra de un libro nuevo, no es necesario esperar la entrega ni acudir a una librería.

Peso – Llevar un libro debajo del brazo, en la mochila o en el bolso a lo largo del día puede llegar a ser molesto, principalmente si se trata de un libro grande. Los libros electrónicos se pueden leer en cualquier dispositivo, lo que significa que puedes llevar miles de libros en el bolsillo.

Sostenibilidad – Al no utilizar papel, es una opción más sostenible para el medio ambiente.

Cómo leer e-books sin cansar la vista

Adaptar el brillo del dispositivo – Uno de los factores que más afecta la lectura en equipos como computadoras, tablets y celulares es el brillo intenso de las pantallas, lo que puede cansar la vista más rápidamente.

Lo ideal es ajustar la configuración y ajustar el brillo a los niveles más bajos para asegurar una lectura fluida. Poner tu teléfono celular en modo nocturno también puede ayudar a reducir el brillo de la pantalla.

Ajustar el contraste de la pantalla – Configurar el mejor contraste en su monitor o pantallas también garantiza una lectura más fácil, sin forzar demasiado la vista. La luminosidad del ambiente también interfiere. No leas en ambientes muy oscuros, ya que el contraste entre la poca iluminación y la luz de la pantalla puede provocar molestias visuales.

Descanse los ojos – A pesar de toda su practicidad, un libro electrónico sigue siendo una pantalla y debe utilizarse con el debido cuidado. Es recomendable hacer pausas en la lectura de 5 o 10 minutos para que tus ojos puedan descansar y lubricarse. Evite los ojos secos con “parpadeos” más frecuentes.

Posición y ambientes – Coloque el libro digital debajo de la línea de sus ojos y de preferencia lea en ambientes con luz natural. Si no es posible, las lámparas amarillas son una mejor opción.

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