Liberaron al cóndor que fue rescatado en el lago Traful meses atrás

El cóndor juvenil llamado «Traful» finalmente fue liberado a su hábitat natural ayer, en el parque nacional Nahuel Huapi, luego de haber sido rescatado con una intoxicación del lago Traful, en abril pasado.

La liberación se produjo como parte del Plan Integral de Conservación Cóndor Andino, luego de la rehabilitación del ejemplar macho juvenil de cóndor andino en el ecoparque Temaikén, en Escobar, provincia de Buenos Aires.

Ayer el ave «retornó a la vida silvestre, y fue liberado desde un sector con altura en la zona de Traful, en el parque nacional Nahuel Huapi», informó el organismo nacional que remarcó que se trata dl cóndor 236 liberado en el contexto del plan de conservación.

«Invitamos a toda la sociedad a comprometerse en la protección del cóndor, ave emblemática, especie clave en el equilibrio del ecosistema andino y eslabón simbólico con nuestro pasado cultural sudamericano», señalaron desde el parque Nahuel Huapi.

El rescate del cóndor se había realizado en abril en la zona norte del parque, en el lago Traful, junto a un guía y una veterinaria de la localidad, quienes divisaron que luego de despegar desde la Ruta Provincial 65, el ejemplar cayó al lago. En ese momento, subieron a sus kayaks para auxiliarlo. Al llegar al punto en el que se encontraba el cóndor nadando, se hicieron presentes Prefectura Naval y el guardaparque del Área Protegida, logrando subirlo a uno de los kayaks. El cóndor permaneció parado en la proa, con las alas extendidas.

Una vez arribados todos a la orilla del lago, se lo trasladó a un lugar seguro donde, junto a veterinarios locales, se realizaron los primeros auxilios y obtuvieron las muestras de sangre necesarias para evaluar su estado. El ejemplar presentaba una severa intoxicación por ingesta de plomo, lo que ponía en peligro su vida. Estas aves carroñeras se alimentan de animales silvestres muertos, que en muchas ocasiones poseen esquirlas o municiones que contaminan la carne, que al ingerirla ingresa al torrente sanguíneo. Esta es una de las principales amenazas de la especie.

Luego de la primera asistencia, con colaboración de Aerolíneas Argentinas y el apoyo de la Brigada de Control Ambiental del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Nación, el cóndor fue trasladado de urgencia al centro de rescate y rehabilitación en aislamiento humano del bioparque Temaikén.

E su lugar de rehabilitación se le volvieron a realizar análisis y dos tratamientos de quelación que se sumaron al que había recibido tras su rescate en el parque nacional. Los veterinarios también le hicieron una biopsia de hueso y temporalmente se le disminuyó la dieta para generar una reacción que ayudara a liberar el plomo a sangre y poder extraerlo en la quelación. Asimismo, se monitoreaban periódicamente sus niveles de plomo en sangre. De esta manera el equipo técnico, durante meses, llevó a cabo un complejo protocolo de rehabilitación que permitió eliminar el tóxico de su cuerpo.