La inteligencia artificial recreó cómo se vería Natalia Acosta, una mujer desaparecida hace años
Desde su desaparición hace más de 10 años, no hay rastros del paradero de la santafesina, solo una sospecha de que se encuentra en una red de trata. La última imagen que existe de ella es de 2009 y estaba dificultando su búsqueda ya que, se supone, su fisonomía cambió en todo este tiempo.
Natalia Acosta desapareció hace 14 años y se sospecha que es víctima de trata. Foto gentileza.
Nuevos usos de la inteligencia artificial comienzan a expandirse en la sociedad. Esta vez, se trata de un trabajo articulado entre diferentes organismos del Gobierno Nacional y el de la provincia de Santa Fe para el cual ambas autoridades recurrieron a la IA y recrearon cómo se vería una mujer que desapareció hace 14 años y se sospecha que es víctima de trata.
Históricamente, esta tarea se realizaba con la ayuda de ilustradores profesionales y de programas de computación como Photoshop. Por ejemplo, hace dos años la mamá de Sofía Herrera, una niña desaparecida en Tierra del Fuego en 2008, difundió unas imágenes digitalizadas que había realizado una profesional a través de un programa con la computadora, según informa Clarín.
Pero en este caso se trata de Natalia Liliana Soledad Acosta, quién desapareció en la localidad santafesina de Santo Tomé el 29 de mayo de 2009 cuando tenía 21 años. La última vez que la vieron fue en la capital de la provincia en la esquina de las calles Suipacha y 25 de Mayo.
De acuerdo con la información brindada por Clarín, la justicia provincial mantuvo la causa como de “averiguación de paradero” prácticamente sin avances ni noticias hasta que a fines de 2016 pasó al fuero federal con otra carátula: “trata de personas”.
Cuando desapareció, Natalia fue descrita como una persona de cabello negro, lacio y largo, contextura delgada, de 1,70 metros de altura, tez blanca, ojos marrones, piercings en la nariz y una cicatriz visible en el pómulo izquierdo, según informa Infobae.
A partir de una foto cercana al momento de su desaparición, lograron recrear una posible fisonomía actual de la víctima a través de inteligencia artificial. Esta información es de ayuda debido a que, al pasar más de una década desde su desaparición, su rostro tuvo que haber cambiado.
“Para los familiares de Natalia lo fundamental es poder seguir adelante con la búsqueda y, en este sentido, para algún caso de contacto con Natalia es fundamental tener una imagen actualizada”, explicó a Clarín Marcela Rodriguéz, titular del Programa de Asesoramiento y Promoción de Derechos de las Víctimas del Delito de Trata de Personas de la Defensoría General de la Nación.
Esta imagen “actual” de la joven junto a su antigua foto del 2009 fueron difundidas por el Ministerio de Seguridad junto con el anuncio del aumento en la recompensa a 4 millones de pesos para quién aporte datos de su paradero o alguna información relevante a la causa.
Debido a que Natalia está desaparecida y no puede ejercer sus derechos, todas estas acciones realizadas con IA cuentan con el consentimiento de Ariel y Carmela Acosta, el padre y la hermana de Natalia. Según TN, ambos tienen como objetivo principal saber qué pasó, incluso si esto implica el fallecimiento de la víctima.
La inteligencia artificial y la trata, una alianza que puede potenciar las búsquedas
En Argentina, según el reporte de la Línea 145 del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas en Argentina, entre los años 2018 y 2022 se reportaron un total de 8.744 denuncias, es decir, un llamado cada cinco horas.
Si bien aún no hay novedades sobre Natalia, este es un claro ejemplo de cómo la inteligencia artificial puede ser realmente útil. Hemos visto, a lo largo de los años, que siempre se ha intentado retratar cómo se verían las víctimas que no aparecen hace años. Por ejemplo, cómo se vería Madeleine McCann en la actualidad.
Hoy está a disposición esta tecnología que, a través de su machine learning, puede crear fotos de una manera precisa y rápida. Esto se puede volver un elemento de extrema utilidad para el Estado y todos aquellos organismos que están en constante búsqueda.
En un debate sobre las potencialidades de la inteligencia artificial, el historiador y escritor israelí Yuval Harari aseguró que esta tecnología en “las manos correctas” podría ser maravillosa, de lo contrario podría incluso destruirnos. La iniciativa impulsada con el fin de encontrar a Natalia es un claro ejemplo de lo que pueden hacer las “manos correctas”.
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