La crecida de los ríos arrastró parte de la pasarela de Garganta del Diablo en Cataratas del Iguazú
La velocidad de los caudales generó el desprendimiento de una parte de la pasarela, pero por el nivel de agua aún no se puede evaluar el daño total del evento.
Por el momento, no se puede conocer el nivel de daño en Garganta del Diablo por la gran cantidad de agua. Foto: Télam.-
Las crecidas en los ríos Iguazú y Uruguay, que desde hace algunos días se registran en la zona de Cataratas del lado brasilero, generaron el desprendimiento de una parte de la pasarela de «Garganta del Diablo», conocida por su demanda turística.
La estructura se vio afectada por el desborde del agua, que generó que se moviera de sus ejes y cayera al agua. Por esta razón, los expertos trabajan contrarreloj e intentan salvar los pilotes dañados para volver a colocarlos en su sitio.
Las autoridades señalaron que «el agua todavía está muy alta», por lo que por el momento «no podemos evaluar todo el daño».
«Los pilotes están atados con acero y se han deslizado en el río, hay que recuperarlos para rearmar nuevamente. No se puede cuantificar el daño real” señaló Atilio Guzmán, intendente del Parque Nacional Iguazú.
Por el momento, no hay fecha de apertura del circuito porque «es muy apresurado dar una respuesta del daño real». «Hay que esperar que baje el agua para saber» agregó Guzmán.
Algo heavy las #cataratas del #iguazu
— 97.3 mhz Posadas 🗼 (@radiotrestres) October 12, 2022
La #gargantadeldiablo permanece cerrada por la crecida pic.twitter.com/7gXyXKvikQ
Por qué se produjeron las crecidas en la zona de Cataratas
Las lluvias en las altas cuencas hicieron que el caudal creciera de manera considerable durante el último fin de semana, por lo que en las Cataratas se registraron caudales de entre 5.000 y 8000 metros cúbicos por segundo.
El pasado jueves, las intensas precipitaciones en la zona de las altas cuencas provocaron la crecida de los ríos de la zona, con desbordes de los cursos de agua. Esa situación obligó a evacuar a los turistas y cerrar preventivamente del Parque Nacional Iguazú.
Sin embargo, el viernes se restableció la atención en el predio y la llegada de los visitantes se daba en su horario habitual, de 8 a 18. Actualmente, solo estaban habilitados los circuitos superior e inferior.
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