Innovadora cirugía a una paciente con cáncer de mama en Roca: «Estamos a la vanguardia»
Un equipo de cirujanos de Roca lideró una cirugía inédita en la región. Una paciente se operó de cáncer de mama y pudo acceder a una reconstrucción sin prótesis mamaria, con una parte de su propio cuerpo. Una tendencia que llegó para quedarse.
En solo cuatro horas, una mujer de Roca con cáncer de mama accedió a una terapia que la ayudó no solo a curarse sino a reconstruir su busto con sus propios tejidos, sin implantes artificiales ni prótesis mamarias lo que le dio ventajas de por vida a una reconstrucción convencional.
“Entrás con el tumor y salís, sin el tumor y con tu mama”, lo simplificó la mastóloga a cargo de la operación, Natali Grippo en una entrevista con RIO NEGRO. “Estamos a la vanguardia de lo que se hace a nivel mundial”, dijo la especialista de Roca. Así se logra lo que el médico busca para su paciente: “brindarle lo mejor, las mejores opciones terapéuticas y quirúrgicas”, agregó.
Es tendencia a nivel Europa, pero en Argentina no es común. “Lo innovador de esto es que la paciente no recibe ningún material plástico como serían las prótesis mamarias”, contó la profesional.
Esta cirugía inédita en la región se llevó adelante ayer jueves 14 de septiembre en manos de un equipo de cirujanos, una mastóloga, ginecólogo y torácico íntegramente de Roca, Natali Grippo, Alejandro Vona y Guillermo Aubone quienes llevaron adelante la intervención en el sanatorio Juan XXIII.
Desde el punto de vista de la recuperación del paciente oncológico, al no ver su secuela en la mamá, en una amputación o marcas que le impidan verse como quiere, esta técnica “es muy importante para la recuperación emocional”, expresó.
La denominación es: “Mastectomía con conservación de piel y complejo areola-pezón, con reconstrucción mamaria inmediata, con mini colgajo del dorsal ancho lipoinjertado”. Nunca se había hecho en la región y que llegó para quedarse.
La especialista contó que se trata de una reconstrucción mamaria inmediata por cáncer de mama, en donde se utiliza un mini colgajo del músculo dorsal ancho localizado en la espalda y se lipoinjerta con adiposidad que se le extrae a la paciente, en este caso una mujer de 60 años.
Natali Grippo es tocoginecóloga de Roca y luego hizo la subespecialidad en Mastología en Buenos Aires. Hace más de 10 años que se está formando en cirugía reconstructiva.
El año pasado estuvo en Brasil, España capacitándose y realizando diversos entrenamientos en cirugía oncoplástica. “Surgió esta cirugía en el último congreso que se hizo en Buenos Aires, en donde se planteaban todas las cirugías de vanguardia que se le van ofreciendo al paciente”, relató.
Una tendencia que llegó al país para quedarse
“Si bien la tendencia en Argentina es hacer las mastectomías y colocar prótesis mamarias para lo que es la reconstrucción, esta una tendencia que está surgiendo en Europa y sobre todo en Francia, en donde se reconstruye con el tejido autólogo, eso la ventaja que tiene es a corto plazo porque logras la simetría y a largo plazo porque la mama acompaña a las modificaciones del peso de la paciente”, explicó Grippo.
«(La técnica) llegó para quedarse y para proponerle otra opción reconstructiva a la paciente, de las que ya estaban en vigencia. Tiene una rápida recuperación y lo más importante: cura desde el punto de vista oncológico y con resultados que se mantienen en el tiempo»
Natali Grippo, mastóloga de Roca
“La reconstrucción permanece estable durante el tiempo. El hecho de hacer la lipotransferencia, que a la paciente se le saca la grasa de su cuerpo (…) lo que tiene de característica la grasa es que tiene un poder de angiogénesis, entonces como que el adipocito se empieza a reproducir solo. Es muy interesante”, recalcó.
Esta metodología tiene mejores resultados a corto y a largo plazo si se la compara con la utilización de las prótesis mamarias porque estas últimas a los cuatro años requieren una revisión o presentan una asimetría por los cambios de peso de la paciente. En este caso, el colgajo acompaña a la variación de peso de la paciente y siempre mantiene una asimetría perdurable en el tiempo.
Lo que ya se había utilizado antes es el “colgajo del dorsal ancho completo”, pero en este caso es un mini colgajo del dorsal ancho en donde se conserva el 80% del músculo, es decir, que lo que se extrae es muy poco y por eso la persona no queda con ninguna secuela física y puede mantenerse haciendo deportes, lo que es fundamental sobre todo en mujeres jóvenes.
Otro beneficio es que el procedimiento quirúrgico es mínimamente invasivo con ventajas en el postoperatorio y rápida recuperación. “A las 12 horas posquirúrgica, estaba caminando, ya comía. O sea, tiene una recuperación inmediata porque al no sacar todo el músculo, se tolera muy bien el dolor”, detalló la médica.
La técnica y alternativas
En el mismo cuerpo hay zonas que pueden ser útiles para reconstruir una mama.
“A la paciente se le hace una lipoaspiración, esa grasa se trata y se injerta en el colgajo del dorsal y después lo que es la piel de la espalda se desepiteliza y se hace como si fuera una especie de prótesis mamaria con su propio tejido”, explicó Grippo.
Lo bueno es que haya disponible un abanico de cirugías: con reconstrucción inmediata, con prótesis, con colgajos. La decisión debe ser muy activa por parte de la paciente y muy compartida con el profesional.
Son técnicas que se pueden utilizar también en casos de pacientes que se someten a mastectomía de disminución de riesgo por cáncer de mamá. Es una opción también que se le puede ofrecer en vez del implante mamario.
Demanda
- 3
- pacientes con cáncer de mama por semana se operan en el sanatorio privado de Roca, personas de todas las edades.
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