Héroes anónimos, el proyecto impulsado por estudiantes para ayudar a organizaciones sociales en Regina
Son estudiantes de último año del Instituto Secundario Don Bosco. Cada semana realizan colectas solidarias destinadas a merenderos, comedores, protectoras y otras instituciones.
Son estudiantes del colegio secundario Don Bosco de Regina. foto: gentileza
Frente a la situación social del país y el impacto de esta en la economía de las personas, un grupo de adolescentes de Regina se unió con el objetivo de apoyar distintas causas solidarias. Para tener mayor visibilización, invitan a todas las personas interesadas a conocer su iniciativa y a sumarse para «generar un cambio en la sociedad desde la empatía».
El proyecto fue denominado «Héroes Anónimos» y desde hace unas semanas se fue haciendo eco en la ciudad de Regina dandose a conocer entre todos los vecinos de la localidad y otras de alrededor. El mismo se creó dentro de las aulas de quinto año del Instituto Secundario Don Bosco de Regina como parte de la materia del Taller de Propuestas Comunitarias, la cual se implementó el año pasado con el objetivo de que los estudiantes se puedan acercar a las organizaciones de la comunidad.
Según lo informado por la docente Ariana Greco a Diario RÍO NEGRO, este año decidieron abocarse a hacer intervenciones sociales, por lo cual durante el ciclo lectivo fueron realizando distintos trabajos para identificar qué necesidades había en distintos sectores públicos. Fue así que el grupo compuesto por aproximadamente 60 estudiantes, tomó la iniciativa de investigar en torno a aquellas organizaciones sociales que en Regina marcaban la diferencia ayudando a personas y animales.
«Terminaron eligiendo cerca de 16 organizaciones como merenderos y comedores barriales, organizaciones que trabajan con jóvenes con discapacidad, protectoras de animales de distintas localidades; y por ultimo instituciones educativas de nivel inicial», puntualizó la docente.
Frente a la situación actual del país, los estudiantes lograron identificar que las causas comunes se relacionaban con la falta de alimentos, vestimenta, el mal estado de los espacios compartidos por la falta de mantenimiento edilicio o en el caso de las protectoras de animales, la falta de materiales para mejorar el espacio donde son resguardados. «Cada grupo fue trabajando en una línea similar, pero con problemáticas distintas», señaló la docente.
Sin perder el objetivo, tras presentar sus propuestas los estudiantes iniciaron una campaña de difusión para generar empatía en la comunidad y lograr recolectar distintas elementos que podrían aportar a las organizaciones. Así comenzaron un gran recorrido por la ciudad para juntar en su paso alimento, vestimenta, materiales para acondicionar los lugares, incluso hasta plantas para mejorar los espacios verdes, logrando hacerse conocidos entre los vecinos que día a día se comunican para sumarse a su causa.
«Estamos muy contentos todos porque las repercusiones son muy buenas. A veces hay tanta crítica sobre los estudiantes y la juventud, sobre lo que hacen o no hacen, que cuando algo sale así de bien es para destacar», expresó Greco y agregó que también es destacable el esfuerzo de las personas que pese a la difícil situación que pueden estar atravesando en la particularidad de su hogar, «siempre están dispuestos a ayudar».
Asimismo indicó que los estudiantes demostraron estar sumamente comprometidos con el proyecto que fue creado por ellos, al punto de que cada semana están en permanente contacto para constatar qué otras necesidades pueden cubrir o en qué pueden ayudar.
La docente informó que la colecta de los estudiantes sigue en pie y por ello continúan solicitando que las personas interesadas en aportar se comuniquen a través del número 2984 52-0079. «Cada pequeña contribución puede tener un gran impacto. Cada acto de generosidad nos acerca un paso más al objetivo de construir un mundo más compasivo y solidario», concluyó.
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