Futuros técnicos fabrican dos autos ecológicos en Roca: necesitan ayuda para brillar a nivel país
Chicos de 16 y 17 años del CET 1, el colegio público con más historia de Río Negro, van por todo: están construyendo dos autos eléctricos que llevarán a Buenos Aires para pilotear en una reconocida competencia. A ellos les sobra la pasión, lo que necesitan es el aporte de la comunidad.
Los estudiantes del Centro de Educación Técnica (CET) N° 1 de Roca volverán a pilotear sus propios autos sustentables, diseñados y fabricados íntegramente en Río Negro. Lo harán en una competencia nacional educativa por tercer año consecutivo los días 1, 2 y 3 de noviembre de este año en Buenos Aires.
A las corridas y a todo ritmo, van a y vienen. Todos los días un poquito más. El aula les queda chica, pero pasan horas y horas trabajando luego de talleres y educación física. Dibujando, preparando la maqueta del chasis de lo que será el nuevo modelo 2024 que se acoplará al de 2015, que fue reacondicionado.
Emocionados, el equipo conformado por once estudiantes y dos profesores de cuarto a sexto año de la especialidad mecánica de la escuela técnica más antigua de la provincia, se preparan para participar en «Desafío ECO YPF 2024» como una de las más de 100 escuelas de todo el país.
El año pasado, los estudiantes ya habían fabricado un auto eléctrico innovador y ganaron el primer puesto en la competencia «SetUp Challenger», una prueba de destreza conductiva. Quedaron entre los diez mejores del país. Pero esta edición van por más: quieren dos autos en pistas.
“Estamos con muchas ganas de participar. Quedamos con muchas expectativas del año pasado que nos fue muy bien. Estamos preparando el auto nuevo para mejorar esa experiencia”, contó uno de los chicos en una charla con Diario RIO NEGRO. “Es un verdadero reto para todo el grupo” contó.
Morena Venegas, Rocío Mancilla, Cala Cide Bueno, Juan Escalante, Iñaki Hernández, Agustín Fulini, Franco Amrein, Tomas Díaz, Federico Rojas y Dihago Navarro tienen entre 16 y 18 años. Son solo once de los casi 900 estudiantes de la matricula y solo una porción de los que se preparan para ser técnicos mecánicos de tipo industrial: muchos de ellos vienen de familias apasionadas por los “fierros”.
Amor por los «fierros»
«Cuando era chiquita, me encantaba estar metida entre los carros. Mi viejo maneja karting y le enseñó a mi hermano. Era lo más lindo de estar ahí con ellos. Me gusta estar dentro de los motores, cables, trabajar con máquinas, usar herramientas”, contó Rocío.
“Siempre me gustaron los fierros. Mi viejo siempre estuvo en el tema y siempre quise competir a nivel nacional», contó otro de los participantes. “Es algo que me apasiona. Yo de chico siempre quise ser ingeniero mecánico. Y eso es lo que voy a estudiar cuando salga del colegio. Siempre me encantaron las máquinas, su funcionamiento”, reveló otro de los jóvenes.
“A mí me encantan las máquinas y herramientas. De grande, quiero tener mi metalúrgica. Es un sueño para mí”, agregó otro de los entrevistados.
Un auto ecológico es un vehículo de contaminación cero. Se compone de un motor trifásico impulsado por cuatro baterías de 12 voltios cada una que en total generan 48. La energía de esas baterías pasa a una caja controladora que luego va hacia el motor, a su vez impulsado por una sola rueda de tracción.
Los objetivos más ambiciosos -pero posibles para el talento y dedicación del equipo- generan una elevación en los costos y por eso, lanzan una campaña solidaria para dar con colaboradores, patrocinadores y sponsors entre la comunidad.
Tres pilotos conducirán los autos que no levantan más de 40 kilómetros por hora, por su especificidad. De los once, son dos varones y una chica los que tendrán esa tarea. «No tengo experiencia con el karting, no practico el deporte pero me están enseñando mis compañeros de equipo y profesores”, contó Cala, una de las designadas al volante, con 16 años.
Además, el principal objetivo para esta edición es ampliar el grupo de estudiantes que participan del proyecto. Buscan que más jóvenes y fututos técnicos vivan la experiencia. «Competir con dos autos duplica el número de estudiantes en pista», comentaron Marcos Criaevich y Cristian Fernández, profesores a cargo de acompañar a los alumnos en todo el proceso.
“Este evento ofrece una oportunidad única para que los estudiantes demuestren sus habilidades técnicas y deportivas, promoviendo valores como el trabajo en equipo, el compañerismo, los saberes técnicos aprendidos en la institución y el espíritu deportivo, sumado a la pasión por el automovilismo”, aseguraron.
“El colegio se encuentra en muy buena posición y queremos dejar de vuelta una marca en lo que es la competencia”, aseguraron los estudiantes. Además, participarán del certamen escuelas de Regina, Cipolletti, Viedma. Catriel y Bariloche.
Un proyecto con impacto nacional
«Este es un proyecto educativo que tiene impacto nacional”, destacó Cristian Fernández, uno de los docentes en diálogo con Diario RIO NEGRO. Son más de un centenar las instituciones del país que compiten y muchas son escuelas privadas que cuentan con sponsors y apoyo económico de empresas, lo que hace más dificultosa la competencia para los roquenses.
«El año anterior tuvimos un muy buen resultado. Las expectativas eran buenas, pero no imaginábamos ganar una competencia, quedamos décimos a nivel nacional. Pudimos ser la escuela pública técnica de la Patagonia con mejor resultado. Compartimos este puesto con la escuela de Regina del Instituto de Regina, que es una escuela pública, pero de gestión privada”, refrescó Fernández.
“Se abren puertas para los chicos, como estudiantes en otro contexto, que no es el del aula, como tampoco el del taller, porque acá ponen mucho en juego. Somos testigos de estudiantes que participaron en el proyecto y les abrió la puerta para trabajar en empresas de renombre”.
Cristian Fernández, uno de los docentes del equipo.
Los egresados del CET 1 terminan trabajando en talleres mecánicos, rectificadoras, metalúrgicos, y en las economías regionales más importantes como es la fruticultura, galpones de empaque para las áreas de mantenimiento.
“Para ir a trabajar a la industria petrolera Diré que más del 80 % levantarán la mano. Por encuesta, acá la mayoría de los estudiantes eligió hidrocarburos como el lugar donde les gustaría trabajar en un futuro”, contó como anécdota el docente.
Campaña de aportes y materiales
En estos meses de preparativos, piensan hacer algo diferente para estar a la altura de la reñida competencia y pedir aportes de la comunidad desde dinero o autopartes, para poder lograrlo. La campaña está en marcha y ya aparecieron algunas colaboraciones y sporsors pero aun falta. Desde un sector político hubo compromisos de declarar el proyecto de interés a nivel provincial.
“Están las puertas abiertas para cualquier sponsor, para cualquiera que se quiera sumar, que se quiera unir y nos quiera donar su granito de arena”
, cerró uno de los estudiantes.
Ahora la institución se encuentra en un momento bisagra ya que no están llegando los aportes para insumos de talleres por parte de Nación como tampoco de Provincia desde que inició el ciclo lectivo. Ante esa crítica situación, desde la comunidad educativa se organizan para reclamar y garantizar la educación de los chicos, ante las carencias.
«El dinero recolectado será destinado a inscripción del segundo auto ($350.000 aproximadamente), el traslado y el hospedaje en Buenos Aires y materiales para la construcción del segundo auto»
Se puede colaborar con el equipo de CET N°1 a través de los profesores a cargo Marcos Craievich al 2984286996 o Cristian Fernández al 2984403923.
La historia de la escuela, el CET 1
Este establecimiento de Roca, que fue cambiando de nomenclatura con el paso de los años, fue fundado el 2 de julio de 1938 y fue la primera escuela en la provincia de Río Negro. Primero fue la Escuela de Artes y Oficios de General Roca y luego, en la década del 50, al ciclo inicial de tres años, se agregó un cuarto año. De esta forma, pasó a ser la Escuela Industrial de la Nación.
En 1962 se creó el ciclo superior por parte del Consejo Nacional de Educación Técnica y así quedó constituida la ENET 1 de Roca. Ahora es CET N° 1 y lleva el nombre del fundador del colegio: «Antonio Sánchez Platero».
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