El hundimiento de la Ruta 22 que es una trampa para los turistas que pasan por Neuquén
La señalización de Vialidad Nacional en el lugar no ayuda a dimensionar el real peligro que presenta el profundo hundimiento. Es una zona donde se tránsita a altas velocidades. Dónde está y por qué no lo arreglan.
A unos 12 kilómetros desde la rotonda conocida como Pluspetrol, la primera que aparece pasando la YPF en sentido este-oeste. Foto: Oscar Livera.
El fuerte temporal de lluvias que azotó a la región en febrero pasado, generó serias complicaciones en la provincia de Neuquén. Pero a cinco meses del fenómeno es incompresible que haya daños que aún no se repararon. Un ejemplo de ello es el profundo hundimiento en la Ruta Nacional 22 en Plottier, dentro del tramo del sector conocido como Autovía Norte. El desperfecto, que solo está señalizado con imprecisión, representa casi una trampa mortal para los conductores y más aun para los turistas que, en épocas de vacaciones, se multiplican.
Las deformaciones provocadas por el hundimiento de la cinta asfáltica ya ocasionó vuelcos y accidentes en el punto ubicado 6 kilómetros antes de llegar a la planta de generación de energía eléctrica y térmica Capex. En febrero pasado se produjeron dos accidentes que terminaron con autos fuera de la ruta y personas que necesitaron asistencia médica.
Sin importar la hora del día, las alteraciones en la ruta implican un peligro para quienes circulan a diario, pero sobre todo para los vehículos que hacen el recorrido por primera vez y no conocen el estado del asfalto de ambos sentidos.
El mantenimiento del camino está a cargo de Vialidad Nacional y hasta el momento solo se dispusieron carteles, tambores, conos y señalización iluminada para dar aviso a cualquier automovilista desprevenido. Sin embargo, en estos meses no se vieron movimientos de máquinas o personal trabajando sobre el asfalto dañado. El trabajo fue licitado dos veces, pero nadie se presentó y la UTE que realizó la obra, CN Sapag-Luciano, le informaron al organismo nacional que tenían otras obligaciones.
Mapa del punto de peligro para los conductores
El punto exacto desde el este-oeste: es a unos 12 kilómetros desde la rotonda conocida como Pluspetrol, que da a la calle Río Colorado en el límite de Neuquén capital. Para quien no conoce la zona es la primera rotonda que aparece después de pasar frente a la estación de servicio de YPF.
Para quienes circulan en sentido inverso, porque el hundimiento está en ambas manos, el punto exacto en sentido oeste-este: se ubica a unos 6 kilómetros desde la rotonda de Capex en dirección hacia Neuquén capital.
Frenadas, derrapes y una banquina en mal estado suman imágenes al contexto de un tramo que cuenta también con un intenso tráfico petrolero, ya que está próximo a varias locaciones hidrocarburíferas y además conecta con el Parque Industrial de Neuquén capital.
Si bien Vialidad Nacional instaló unos carteles, conos y hasta una casilla, el moderado despliegue que ve el conductor no ayuda a dimensionar el real peligro que presenta el profundo hundimiento. Sobre todo porque es una zona donde se transita a altas velocidades.
El desperfecto en la calzada se conoce desde que se habilitó la circulación por el sector. Sin embargo, el hundimiento se profundizó con las lluvias de principio de año y se volvió cada vez más peligroso. Quienes circulan a diario por el lugar saben que las señalizaciones, que dicen «calzada deformada», son más que eso y bajan la velocidad. Sin embargo, los turistas o quienes hace tiempo no pasan por el sector se sorprenden y hasta pasan un mal momento con sus familias si no alcanzan a reducir la velocidad.
Un sector alejado de todo y hasta de las comunicaciones
Para un turista que busca dirigirse hacia la cordillera, el paso fronterizo Pino Hachado o el centro de la provincia, la nueva Ruta 22 -Autovía Norte o Ruta de Circunvalación, como la denominan los mapas digitales- se presenta como la mejor opción. Incluso el propio GPS suele sugerir ese camino por sus dobles vías y carencia de semáforos. Sin embargo, no solo las ondulaciones en el asfalto pueden jugar una mala pasada quien circunstancialmente pase por ahí.
En ese tramo no hay señal de teléfono ni de internet, por lo que ante cualquier emergencia comunicarse con una grúa o realizar un llamado, puede convertirse en una verdadera odisea para los automovilistas, colectiveros y camioneros.
Otro factor adverso, es que a pesar de pertenecer al ejido de la ciudad de Plottier, no cuenta con una conexión directa vía terrestre con el casco urbano. Es así que no se puede acceder al Hospital, Terminal de Ómnibus (ETOP) o a una estación de servicio de la localidad, sin realizar varios kilómetros extras.
Es así que los Bomberos Voluntarios de Plottier, para ofrecer asistencia a un evento en la zona de las ondulaciones, tienen que recorrer 20 kilómetros para llegar al punto de las ondulaciones.
«Hacemos 20 kilómetros de ida y otros 20 de vuelta, porque no contamos con un corredor directo que una el centro de Plottier, con la nueva Ruta 22» comentaron a RÍO NEGRO desde el Cuartel de Bomberos Voluntarios de Plottier.
La misma suerte corren otros vehículos de emergencia como Defensa Civil o ambulancias del Sistema Integrado de Emergencias del Neuquén (SIEN).
Desde la institución rescatista detallaron que a pocos kilómetros de ese punto hace unos meses murió un camionero y también se suelen asistir incidentes ocasionados por el impacto con animales sueltos.
Por el momento y tras una seguidilla de incidentes, la única medida de seguridad realizada fue la colocación un móvil con una persona de Vialidad Nacional, que custodia la señalización y trabaja para que la misma sea visible para los conductores, aunque de obras para reparar el asfalto, todavía no se realizaron anuncios.
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