Dos días de lluvia y Roca quedó con las calles detonadas

En poco más de 48 horas cayeron 24 milímetros de agua y no se registraron evacuados. La cifra está lejos de los 90 milímetros que cayeron en una sola noche, en febrero de este año.

No fue un temporal intenso ni la cantidad de agua caída quedará en las estadísticas más altas de los últimos años. Lo que sí quedó en la retina de los contribuyentes es el estado deplorable de las calles de la ciudad tras los 24 milímetros de agua que cayeron durante el fin de semana.

Y tal vez el problema no tuvo su origen en la propia lluvia sino en el marcado deterioro en el que están las calles (de asfalto y de tierra) y que ha llevado a un histórico enfrentamiento entre el municipio de Roca y las autoridades de ARSA por la situación que existe con la red de agua y la de cloacas.

ARSA y el municipio de Roca, colocaron vallas para evitar las caída o choques contra los montículos de tierra. (foto: Alejandro Carnevale)

Ayer domingo, las «aguas danzantes» -tal como lo describió un vecino- se podían observar en calle Jujuy casi Rochdale donde una tapa de registro terminó saliendo de su lugar por la presión del agua contaminada y la de la lluvia. Pero los problemas en esa arteria fueron varios. A pocos metros, en la rotonda, un by pass cloacal transitorio generó más de un inconveniente.

Es que para pasar el caño por debajo de la cinta asfáltica (foto) el personal de ARSA tuvo que romper el pavimento y lo volvieron a rellenar con ripio. Como era de esperar, la lluvia «lavó» el material y lo cubrió con agua. Sólo el ruido seco de las ruedas de los vehículos advertía a los automovilistas que estaban en medio de un cráter de increíbles dimensiones.

Una verdadera «grieta» se abría en calle Rochdale y Jujuy donde ARSA rompió el asfalto para instalar un by pass por una rotura de la red cloacal. (foto: Alejandro Carnevale)

Qué se puede decir de calle Mendoza y 25 de Mayo, en la rotonda, donde los comerciantes de la vecindad imploran a la empresa ARSA que repare una pérdida de agua que está hace varios meses. La filtración ya rompió la cinta asfáltica y dejó otro problema para los automovilistas y transeúntes en ese sector de la ciudad.

Fueron infructuosos los esfuerzos para desagotar los lugares habituales donde se acumula agua. (foto: gentileza)

Si de deterioro se habla, no se pude dejar de lado calle 9 de Julio y España donde también las «aguas danzantes» tuvieron su protagonismo. El problema de cloacas sumado a la rotura del asfalto volvió a tomar notoriedad sumado a otras dos roturas que aparecieron entre España y Maipú.

A todo esto se suma el agua que habitualmente se concentra en los días de lluvia en la calle que une avenida Roca con San Juan.

Pero los problemas no sólo se originaron en las calles asfaltadas. «No te cuento cómo está la zona de Alta Barda, de la Ruta Chica entrando a Gomez. Ni hablar de la zona de Quinta 25, en la zona cercana a la Alcaidía (Penal N°2), todas las calles son un desastre. Incluida la calle Mendoza y Rochdale donde hay un terrible pozo», dijo una vecina consultada por La Comuna.

Algunos vehículos quedaron encajados tras los 24 milímetros de agua que cayeron durante el fin de semana. (foto: gentileza)

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