Dos ballenatos aparecieron muertos con diferencia de días en las playas de Puerto Madryn, Chubut
Los cadáveres de las crías de cetáceos llegaron a la orilla en alto grado de descomposición. Los biólogos piensan que nacieron en mayo, y que son parte de la tasa natural de mortandad de la especie
Los científicos que realizaron la necropsia de uno de los ballenatos. Este animal apareció ayer, en playa Káiser
Dos crías de ballenas francas aparecieron muertas en distintas playas de Puerto Madryn, en Chubut. Los hallazgos de los cadáveres se dieron con escasos días de diferencia, y los biólogos que intervinieron en las necropsias piensan que los ballenatos nacieron en el mes de mayo, y que sus muertes se inscriben en la tasa natural de decesos de la especie, ya que no todos los animalitos llegan a desarrollarse.
El último ejemplar apareció ayer a las 11 de la mañana en la playa Káiser, ubicada al sur de la zona céntrica, mientras que el primero fue divisado el sábado en el El Doradillo, que está a 15 km en dirección al norte.
En ninguno de los casos los ballenatos, que fueron analizados por un equipo de profesionales, contaban con lesiones externas o heridas que hicieran presumir que sus decesos estuvieran ligados a causas accidentales, como cortes provocados por la hélice de una embarcación o contratiempos similares.
«Restan los resultados de las muestras de tejidos. Eso más que nada permite, por descarte, inferir algo más sobre las causas de muerte. Pero hasta ahora, por lo hablado con quiénes hicieron las necropsias, todo indica que estos animalitos forman parte de la camada de nacimientos que se dieron en mayo. Hay un porcentaje de mortandad del 10% para las crías de la especie, por eso, como el mar atrajo a los cadáveres a la costa en alto grado de descomposición, se presume que por causas naturales no lograron sobrevivir, y la marea los acercó a la orilla» expresó María Cabrera, que es directora de conservación de la municipalidad de Puerto Madryn.
Las mediciones que se efectuaron también indican que eran recién nacidos. «El ballenato que apareció el miércoles medía 3, 58 metros, y el del sábado era apenas más largo. Eso nos muestra que eran crías recientes» subrayó la mujer.
Con respecto a las necropsias, se efectuaron directamente en las playas donde se hallaron los cadáveres, y la marea se encargó de llevarse los restos, que el oleaje arrastró mar adentro.
Como dato particular la funcionaria compartió un detalle. «Esta vez las ballenas francas comenzaron a verse con mucha anticipación en la ciudad, y también se adelantaron las pariciones. Generalmente los partos se dan en junio o julio, y este año hubo varios nacimientos en mayo» destacó.
Afortunadamente, más allá de estos episodios con los ballenatos, la temporada de avistaje se está viviendo con éxito. «Madryn es una fiesta, como ocurre cada año» finalizó Cabrera.
Comentarios