Desarrollan una manta que protege ante derrames en los yacimientos petrolíferos
Es elaborada por el Conicet y la UBA. La empresa Emerald reconoció la necesidad de mejorar el sistema de mantas usado "desde hace más de 10 años en Neuquén para proteger los impactos de los carburos en el suelo".
La manta tiene características únicas: está fabricada con biopolímeros y es reutilizable. Foto: gentileza
El Conicet y la Universidad de Buenos Aires (UBA) firmaron un convenio con la empresa Emerald para la producción de mantas oleofílicas e hidrofóbica con alta capacidad absorbente que serán utilizadas para la recuperación y la remoción de hidrocarburos ante derrames acuosos.
La tecnología fue desarrollada por la investigadora del Conicet Silvia Goyanes y un equipo constituido por Federico Trupp y Matías Barella, ambos especialistas de la UBA. El producto llamado BIOmanta ya está en proceso de fabricación y pronto podrá reemplazar a las mantas tradicionales en los campos de extracción de hidrocarburos.
BIOmanta está fabricada con materias primas naturales, es reutilizable e impide la propagación de llamas en caso de incendio. Se realizó completamente en el Laboratorio de Polímeros y Materiales Compuestos del Departamento de Física de la UBA.
“La articulación del Conicet con la universidad y la empresa muestra lo virtuosa que puede ser la articulación público privada, en este caso, para solucionar una demanda de la industria petrolera y la vinculación tecnológica es fundamental para avanzar en este sentido”, indicó Daniel Salomone, presidente de Conicet.
El gerente de Emerald Alejandro Iglesias advirtió “la necesidad de mejorar el sistema de mantas usado ya desde hace más de 10 años en la provincia de Neuquén para proteger los impactos de los carburos en el suelo. El producto existente tiene complicaciones para su uso. Por ejemplo, no tiene muy buen comportamiento ante el inicio del fuego. Lo que tenemos actualmente no es muy cómodo para transitar ya que tiene una estructura de valles y crestas que pueden generar tropiezos; en cambio, el actual producto desarrollado es un material homogéneo y la absorción es pareja en toda la superficie”.
Cómo se usa la manta
Goyanes definió a BIOmanta como «una estructura no tejida con una porosidad adecuada, sin problemas para el medio ambiente. Es un polímero biobasado, es decir que tiene su origen natural» que está certificado por el INTI y la Universidad Nacional de La Plata. El trabajo comenzó 10 años atrás cuando los investigadores empezaron a entender las ventajas de la estructura porosa, la conectividad de los poros y cómo mejoraba un tipo de no tejido respecto de otro en procesos de absorción.
Los investigadores explicaron que la manta se coloca a lo largo de todo el sitio de extracción. «Todo lo que salga de las máquinas y se pierda es absorbido por estas mantas y evita que se contamine el suelo por todos los desechos los hidrocarburos. Luego, esa manta se retira y se lleva a disposición final que se hace a través de la incineración las partes que no han sido usadas», detalló Federico Trupp, integrante del equipo de Laboratorio de Polímeros y Materiales Compuestos.
Dijo que las ventajas de la manta es que es liviana y por lo tanto, «hay menos material para incinerar y no libera gases tóxicos a diferencia de los materiales de relleno, los materiales particulados que se usan en las mantas comerciales. Por otro lado, deja menos residuos”.
Desde el Conicet, aclararon que si bien la industria del petróleo en Argentina cuenta con proveedores de mantas oleofílicas, existe la necesidad de optimizar la relación eficiencia/costo a fin de minimizar el impacto ambiental de la industria de forma económica. «En este sentido -advirtieron-, uno de los parámetros cruciales que caracteriza a las mantas es su capacidad de absorción de hidrocarburos en relación a su peso. Es de suma importancia porque incide directamente en los costos de transporte, acopio y disposición final. Todos estos procesos escalan con el peso del absorbente».
Comentarios