Denuncian golpiza de policías a un grupo de jóvenes en Junín de los Andes: «Sentían que morían»

El caso fue expuesto por los padres y madres de las víctimas, quienes exigieron la intervención de la Justicia y una investigación de Asuntos Internos. "Tiraron disparos a centímetros de ellos", aseguraron en redes.

Un caso de brutalidad policial fue denunciado en las últimas horas por un grupo de padres y madres de Junín de los Andes, quienes aseguraron que sus hijos, 5 jóvenes que salían de una fiesta en la ciudad, fueron sometidos a violencia verbal, psicológica y humillación moral por parte de los efectivos, el pasado domingo.

El hecho fue expuesto por una de las madres, María Soledad González, con un posteo en Facebook en el que indicó que las víctimas, entre ellas dos menores y una chica, fueron interceptados «sin que existiera una orden de arresto o delito alguno».

Según relató, todo ocurrió el pasado domingo, a la salida de un evento privado realizado en la ciudad cordillerana. En ese momento, el grupo se encontraba emprendiendo el regreso a sus hogares a bordo de un vehículo cuando una camioneta del Grupo Especial de Operaciones Policiales (GEOP) los embistió, alrededor de las 7:30.

La mujer mencionó que, atemorizados por el hecho, los jóvenes siguieron su marcha en dirección al domicilio de uno de ellos en busca de protección, lo que provocó que la unidad policial los empezara a perseguir por varias cuadras.

Al arribar a la casa, González dijo que el grupo fue bajado violentamente por varios uniformados, quienes los habían seguido en la camioneta, «pateándoles las caras tirándolos al piso, tirando disparos a centímetros de sus cuerpos, insultándolos y pisándolos sin haberse resistido ninguno de ellos«.

Incluso, dijo que los efectivos precedieron a exponer las «partes íntimas de uno de los menores» y a seguir «torturándolos alevosamente», mientras otros policías irrumpían «la vivienda familiar rompiendo la ventana y entrando por misma comenzaron a tirar tiros a maltratar con insultos y violencia física a los integrantes de la familia«.

«Se encontraba una joven mamá con su bebé en brazos que la redujeron, la golpearon dejando traumatismos en su hombro y la apuntaron con un arma, uno de los adultos mayores terminó una quebradura ósea mientras golpeaban sin cesar al joven que se había resguardado en la vivienda», añadió González, quien aseguró que hasta le dispararon al perro de la familia.

Desde ese domicilio, los jóvenes, junto al que se había resguardado en la casa, fueron subidos al móvil de la GEOP que anteriormente los había perseguido y fueron llevados al hospital, para obtener certificados médicos.

Finalmente, con amenazas de muerte mediante según la madre que publicó el caso en redes, el grupo llegó a la comisaría de Junín de los Andes, donde fueron descendidos «con la cabeza tapada» y aparentemente esposados, siempre tratando de que «no vieran sus rostros».

Luego del interrogatorio en el cuarto de detención, se les dio aviso a los padres y madres de los jóvenes, privados de su libertad «sin motivo alguno», reiteró González en su posteo, en el que mencionó también que «hay detalles imposibles de describir».


Denuncian golpiza de policías en Junín de los Andes: piden respuestas de la Justicia


Nancy Pacheco fue otra de las madres que denunció la situación y en un posteo propio en redes exigió «la urgente intervención de Asuntos Internos de la Policía, la investigación de la Justicia, y las sanciones internas y penales a los responsables directos de la violencia policial contra niñeces, adolescentes y jóvenes«.

Entrevistada por FM Che Comunitaria de Junín de los Andes, criticó el accionar policial y dijo que desde que expusieron lo que tuvieron que pasar sus hijos «no dejamos de recibir mensajes de otras madres contando historias similares de sus hijos, hermanos y esposos«, sin mayores avances en la Justicia.

«Se les fue las mano», remarcó con la voz entrecortada y añadió: «Tenemos a nuestros hijos con nosotras de milagro, ellos sentían que morían, no sentían su cuerpo porque estaban muy débiles«.

Pacheco también apuntó contra el hospital local, ya que señaló que solo certificaron «lesiones y algunos golpes» en los jóvenes cuando los llevó la policía, cuando en realidad «no podían ni caminar». «Después los llevamos nosotros para que reciban atención médica y les encontraron de todo», afirmó.

«Mi hijo tiene 16 años, golpeado y esposado como un delincuente llegó al hospital» denunció antes de resaltar que el grupo «sufrió la pesadilla de su vida».


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