Contaminación en Villa La Angostura: qué determinó el peritaje ambiental

El informe surge a partir de un amparo colectivo presentado por vecinos. Denuncian que los camiones atmosféricos arrojan líquidos cloacales en diversos puntos de la localidad, sin tratamiento alguno.

El líquido hallado en las cavas de vertido (también llamadas lagunas o piletas) es líquido séptico crudo, sin tratamiento”. La conclusión corresponde al informe del perito ambiental Gustavo Ricardo Altuna tras el amparo colectivo por contaminación presentado por dos vecinos de Villa La Angostura, Gerardo Minnaard y Alberto Cervantes, a principios de marzo.

El estudio plantea que las cavas se encuentran en «mal estado, sin impermeabilizaciones, lo que promueve la filtración de líquido séptico en los estratos y derrames superficiales».

El perito tomó muestras en la zona de las “cavas” y en el arroyo Las Piedritas donde los camiones atmosféricos arrojan líquidos cloacales sin tratamiento el pasado 17 de julio. Según aclara el informe, se trabajó con “buenas condiciones climáticas para el desarrollo de tareas de campo”. Estuvieron presentes Enrique Casagrande, del Ente Provincial de Agua y Saneamiento, y Jéssica Marini y Sebastián Iaretti, de la Municipalidad de Villa La Angostura.

Uno de los amparistas contó que trece años atrás, el municipio de Villa La Angostura implementó unos pozos en el sector del exparque industrial, “sin ningún tipo de contención” para que “los camiones atmosféricos, los baños químicos y las casillas rodantes descarguen el material que sacan de las cámaras sépticas” ya que la planta depuradora no dispone de un sector para depositar sus vertidos.

Esas cavas están ubicadas cerca de la Circunvalación, la parte más alta de La Angostura y constantemente, reciben descargas. “Sucede que tenemos un régimen fluvial anual de entre 2.000 a 3.000 milímetros. Cuando llueve, todo eso se rebalsa por las calles, por los senderos. La primera parada es en la zona urbana. Después todo va a parar al lago”, señaló Minnaard cuando se tomaron las muestras.

El informe ambiental concluyó que, en ese sector “de las cavas”, el daño “refiere a la superficie inmediatamente en contacto con el líquido séptico, además de toda la extensión de la infiltración del líquido por el medio permeable del suelo. Considerando el nivel hidrostático en que se encuentra el líquido de las cavas en relación a los cuerpos de agua presentes y la porosidad del suelo, la contaminación se ha dispersado subterráneamente hacia sectores más bajos por gravedad”. Sin embargo, advierte que para determinar la extensión “de la migración de elementos contaminantes” se deben realizar estudios hidrológicos.

También se extrajeron muestras del sector del arroyo Piedritas en la calle Las Frutillas al 500, donde se rompió el caño de impulsión varias veces en el último tiempo. Minaard especificó que “desde ese lugar hay 160 metros a partir del inicio de la desembocadura en el Nahuel Huapi. Todo va al lago porque está más abajo que el pueblo”.

En relación a este sector, el informe indica que “para las roturas del caño se puede mencionar que una pequeña parte de la contaminación por el vertido del líquido afectó el suelo circundante, pero el cuerpo más afectado fue el arroyo Las Piedritas y consecuentemente, el lago Nahuel Huapi”.

“La base del amparo es que cesen de tirar líquidos cloacales crudos porque afectan el suelo y al agua. Denunciamos cuatro lugares donde los camiones atmosféricos tiran lo que recogen de casas particulares en unas cavas -sin protección- en el parque industrial viejo, detrás de la ruta Circunvalación. Es la parte más alta del ejido de La Angostura al lado del arroyo Colorado», indicó Minaard. Dijo que constantemente «lo que se saca de un lavadero, o un taller mecánico, por ejemplo, se tira a las cavas. Como no hay protección, eso se va por napa freática a las calles y agua abajo, al pueblo».

«El perito -continuó- especificó que esos líquidos son altamente contaminantes. Son entes patógenos que pueden producir enfermedades. Por eso, se pidió un análisis de carcinogenicidad».

Según el informe, la remediación es «difícil»: «Una vez que los acuíferos están contaminados es extremadamente difícil y costoso limpiarlos, lo que puede resultar en la pérdida de fuentes de agua potable seguras«.

Minaard consideró que la remediación «es un asunto complejo cuando se tira material de 4 o 5 camiones atmosféricos por día, desde hace 13 años. Son grandes volúmenes y la estructura del suelo es arena volcánica: es como una esponja». Confió en que el juez prohíba que se tiren líquidos cloacales y ordene un saneamiento o remediación del área.


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