Cómo reconocer y prevenir casos de hostigamiento virtual

Psicóloga referente ESI a nivel nacional explica cuáles son las señales y cómo actuar ante situaciones de ciberbullying

El ciberbullying es una modalidad de violencia agravada por la posibilidad de anonimato que da el internet, la pérdida de empatía que produce el no ver a la otra persona cara a cara, la velocidad de difusión, y la masividad de chicos y chicas que pueden ser parte de la agresión.

Suele presentarse en continuidad con situaciones de bullying, ya que hoy en día todo lo que ocurre en entornos físicos es grabado, fotografiado y publicado en redes sociales y otras aplicaciones.

Son comentarios hostiles en el medio digital, la publicación de fotos modificadas que ridiculizan a quien recibe el hostigamiento, pero también la exclusión sistemática de grupos, de juegos online, de juntadas que se organizan por whatsapp, etc.

La psicóloga Soledad Fuster, diplomada en Educación Sexual Integral y autora del libro “Informe Grooming” (Raíces, 2022), afirmó que aquello que ocurre a través de medios digitales produce efectos reales. “Sus consecuencias, lejos de desaparecer al desconectar la computadora o cerrar una aplicación, persisten a corto o largo plazo, generando un impacto psíquico que afecta la vida de quien padece”, destacó.

Indicadores para identificar casos de ciberbullying, según la psicóloga:

–              Están pendientes de su celular de manera excesiva

–              Angustias o enojos después de utilizar dispositivos.

–              Aislamiento de pares y también de la familia

–              Enojos y angustias repentinas y en apariencia desmedidas

–              Alteraciones del sueño

–              Pesadillas

–              Cambios en su conducta alimentaria

–              Rechazo por su cuerpo

–              Miedos

–              Baja en el rendimiento escolar

–              Negativa a asistir al colegio, al club u otro espacio compartido con pares.

Fuster explicó que este tipo de violencia impacta a quien recibe las agresiones y produce un profundo sufrimiento porque siente que no lo puede detener. También afirmó que el chico o chica que está sufriendo ciberbullying en algún momento intenta pedir ayuda de la manera que encuentra, pero que “la indiferencia o invalidación de sus emociones por parte de pares y personas adultas contribuyen a un escenario aun más revictimizante”, agregó.

De acuerdo con la psicóloga, la desinformación y la naturalización de los micromachismos, entre otros factores, a veces conduce a las personas adultas a ignorar o culpar a quien sufre. En cambio, es el temor y el desconocimiento lo que lleva a un grupo de pares a permanecer en silencio y no ofrecer ayuda. “El riesgo potencial de convertirse en el próximo blanco está siempre presente, limitando su libertad de expresión, cuidado propio y de las demás personas”, resaltó.

Como herramientas de prevención Fuster sugiere:

–              Mantener una escucha activa y respetuosa

–              Una mirada atenta

–              Expresar la decisión de no tolerar las violencias bajo ninguna de sus formas

–              Acompañar y contener a quien padece agresiones

–              Brindar estrategias de autocuidado

–              Intervenir, informando a las autoridades, hablando con otras personas adultas o denunciando la vulneración de derechos

–              Implementar en casa y en la escuela, ESI con perspectiva digital para la prevención y promoción de vínculos saludables.

Y remarcó que “el ciberbullying genera consecuencias a nivel conductual, afectivo, afectivo, social, pudiendo causar desde la baja en el rendimiento escolar hasta el suicidio”.


Certificado según norma CWA 17493
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios

Exit mobile version