Alarma por los robos que afectan los servicios en Río Negro

Los servicios de agua y electricidad se han visto afectados en la región por una seguidilla de robos que han generado serios perjuicios a los usuarios en Río Negro . Solo este año la empresa Edersa calculó una pérdida económica de $130 millones por la sustracción de cables de baja tensión (unos 10.000 metros), de media tensión (alrededor de 5.000) y transformadores.

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Además en los últimos meses se ha incrementado el robo de medidores de agua, dejando sin el suministro a los vecinos que se han visto obligados a pagar el costo de estos artefactos.

El código penal establece que este tipo de delitos sean calificados como hurtos si no se utiliza la violencia sobre las personas o la fuerza para extraer las cosas. Si se usa violencia o la fuerza de cualquier modo, la figura pasa de hurto a robo.

Desde Edersa informaron que los robos de cables no son nuevos, pero desde diciembre de 2021 se han vuelto un problema realmente grave.

Lo más importante es destacar que cuando se producen robos o vandalizaciones de instalaciones, se genera un enorme riesgo en materia de seguridad, para los delincuentes, para los vecinos de la zona y para la seguridad pública en general.

Buscan cobre

Hasta 10 horas se puede quedar sin energía eléctrica un barrio por la vandalización de un transformador de potencia. El interés de los ladrones es el corazón de cobre que tienen dentro que pesa entre 80 y 120 kilos y se vende a más de $2.000 por kilo. Prefieren muchas veces robar un transformador que cientos de metros de cable, señalaron desde la empresa.

Desde principios de 2022 a esta parte se han robado en toda la provincia alrededor de 120 transformadores, con un dato fundamental: más del 90% de los hechos ocurrieron en el corredor que va de Allen a Chichinales, la mayoría en zona rural.

En Allen, por ejemplo, desde fines de 2021 a la fecha Edersa tuvo que reponer 48 transformadores, 10 de ellos a lo largo del corriente año.

Lo llamativo del caso es que los robos de transformadores, en poco más de un mes, se “mudaron” a Cervantes. Allí, entre el 9 de mayo y el 17 de este mes se produjeron nada menos que 11 robos de máquinas de potencia.

Hay escenarios donde los robos de cables y transformadores se repiten cotidianamente como es el caso de la zona rural de Cervantes; chacras de Allen como la N° 32; y el sector de Villa Regina conocido como “Curva del Chancho”.

Importación

Además de todo lo dicho, hay otro enorme inconveniente y es que por las restricciones actuales en materia de importación, el mercado ha restringido también la entrega de materiales y sobre todo de transformadores. Entonces, habiendo consumido ya casi todo el stock, se hace muy difícil reponer ante robos. Llegará un momento, no tan lejano, que no se podrá hacerlo por falta de máquinas.

Desde la empresa indicaron que «eso ya se lo hicimos saber a algunas autoridades, como por ejemplo la intendenta de Cervantes, Claudia Montanaro».
«Nos hemos reunido con autoridades policiales, de la Justicia, intendentes y también provinciales, presentando la preocupación de Edersa frente a un problema que cada vez es más grande. Se trabaja en conjunto por la prevención, pero la realidad es que se ha hecho muy difícil encauzar el flagelo. Eso sí, sabemos que los robos existen porque hay alguien que compra lo robado, y es ahí donde habría que atacar», comunicaron.

El bronce

En cuanto al robo de medidores que también afecta a cientos de usuarios en la región, el interés de los delincuentes es otro metal que se comercializa en el mercado.
Los ladrones no tardan más de dos minutos, primero recorren la cuadra levantando las tapas de los medidores, cortan los extremos de las mangueras que llevan el agua al domicilio y rápidamente escapan con el equipo. El motivo del robo es vender el bronce que se encuentra en el interior del medidor.  
Estos hechos se han registrado en el Alto Valle como Roca, Cipolletti y también delitos similares en la zona de Viedma.

El usuario debe pagar para reponer los equipos

El robo de medidores y bombas genera un serio perjuicio a vecinos no solo por el corte del servicio. Solo hace unos meses el costo para reponer el medidor superaba los $20 mil. El usuario es quien debe pagar esto.

El problema es que como los artefactos están ubicados en la vereda siempre está el riesgo de que los delincuentes se lleven los medidores.

Mientras que el robo de bombas de agua ha provocado muchas complicaciones a instituciones o casas que usan estos equipos para disponer del servicio.

Solo en abril de este año en el Club Deportivo Roca, un par de ladrones que iban en moto se llevaron la bomba que distribuía agua potable “en la confitería, el albergue, la Escuela 150, el espacio de natación, vestuarios y todo el sector administrativo”.
Lo más curioso es que dos semanas antes también había sufrido el robo del mismo equipo.

El sábado 17 de este mes un sujeto que tenía pedido de captura fue detenido mientras estaba robando medidores de agua en la zona norte de Roca.
Cuando los uniformados llegaron, encontraron a un hombre que cumplía con las mismas características que habían brindado los vecinos por teléfono.
Los efectivos luego de revisarlo hallaron una bolsa de nylon con cuatro medidores de agua con signos de haber sido cortados de sus conexiones y un cuchillo tipo serrucho.
Además cuando revisaron sus datos en el sistema, se detectó que tenía pedido de captura por rebeldía.

En diciembre del año pasado y en una sola noche, una banda se alzó con 35 medidores en toda la zona aledaña al barrio Unter de Roca provocando la pérdida de miles y miles de litros de agua.
Los hechos continuaron luego en barrio Las Bardas y en la zona de barrio Nuevo y Tiro Federal.

En Viedma también se registró este año el robo de la bomba de agua del Cementerio Municipal y de tapas de hierro de las estaciones de bombeo del Puente Viejo y Canal Montenegro.

La mayoría de los delitos fueron contra la propiedad privada

Según el informe estadístico anual del Poder Judicial de Río Negro, el año pasado los tipos de delitos ingresados por el Ministerio Público fueron 4.761 en toda la provincia.
El informe detalla que existe una clara preponderancia de los delitos contra la propiedad (39%), seguida por los delitos contra las personas y contra la integridad sexual (ambos representan el 14%).

Los robos y hurtos entran en los delitos contra la propiedad. Desde la oficina judicial indicaron que la sustracción de medidores, cables o transformadores será considerado un hurto si no se utiliza la violencia sobre las personas o para extraer las cosas.
Si se usa violencia o se usa la fuerza de cualquier modo, la figura pasa de hurto a robo. Esa es la primera diferencia importante. Luego, los robos y los hurtos pueden tener agravantes que hacen al monto de la eventual condena.

En cuanto al hurto el artículo 162 del Código Penal de la Nación Argentina señala que “será reprimido con prisión de un mes a dos años, el que se apoderare ilegítimamente de una cosa mueble, total o parcialmente ajena”.

Mientras que el articulo 164 que se refiere al robo establece que “será reprimido con prisión de un mes a seis años, el que se apoderare ilegítimamente de una cosa mueble, total o parcialmente ajena, con fuerza en las cosas o con violencia física en las personas, sea que la violencia tenga lugar antes del robo para facilitarlo, en el acto de cometerlo o después de cometido para procurar su impunidad”.