Siguen los cruces internos en la CGT

BUENOS AIRES (DyN) - El sindicalista Omar Plaini afirmó hoy que el jefe de la CGT, Hugo Moyano, admitió que hubo “un deterioro de la relación” entre la central obrera y el Gobierno nacional, mientras que el dirigente de la CGT disidente Luis Barrionuevo advirtió que la presidenta Cristina Fernández le quitó apoyo a los gremios oficialistas. “La Presidenta le sacó el banquito a Moyano”, resumió Barrionuevo con una metáfora deportiva la situación que enfrenta la CGT, con menor llegada la Casa Rosada que la que supo tener . Después del asado que ofreció el viernes Moyano a representantes gremiales de distintos sectores, el jefe del sindicato de los judiciales Julio Piumato ironizó por Twitter: “No sé por qué se vuelven locos con los reclamos de la CGT si son todas medidas coherentes con un gobierno nacional y popular”. Moyano difundió ayer dos cartas que le envió a la Presidenta con reclamos por el Impuesto a las Ganancias, las asignaciones familiares, los fondos de las obras sociales y una reiteración de un pedido de audiencia para dialogar personalmente los temas. Plaini, otro de los dirigentes que estuvo en el almuerzo en la CGT, afirmó “Moyano no desafía a nadie. El ha sido muy coherente. Ha estado siempre en el mismo lugar defendiendo con las mismas convicciones las reivindicaciones de los trabajadores”.