Shell se sumó a los aumentos y elevó sus combustibles un 4,5%
La firma brasileña Raízen, titular de las estaciones de la tradicional marca roja y amarilla, aplicó un aumento idéntico al de YPF. Detallaron que el aumento es más fuerte en la ciudad de Buenos Aires que en el interior.
El aumento rige desde esta tarde en las estaciones de servicio de la región.
Siguiendo los pasos del aumento aplicado por YPF, la refinería Raízen que llega a las estaciones de servicio bajo la marca Shell, también modificó el precio de sus combustibles que en promedio aumentaron un 4,5%.
El alza en estas estaciones de servicio comenzó a aplicarse desde la medianoche y según se explicó desde la compañía, tiene un mayor impacto en la ciudad de Buenos Aires, en donde la suba promedio es del 6%.
Las refinerías venían solicitando desde hace algunas semanas un incremento en el precio de los combustibles dado que advertían que trabajaban a pérdida por el efecto de la devaluación del peso, la inflación y la vigencia del barril criollo que marca que el barril de petróleo debe ser vendido a 45 dólares.
Los precios finales de los combustibles de Raízen volvieron a mantener de esta forma la paridad que venían teniendo en relación con los de YPF, la principal cadena de estaciones de servicio del país.
Y al igual que sucede con la firma de bandera, los precios en la región muestran que si bien las naftas se ven beneficiada por los recortes impositivos de la zona patagónica, no sucede lo mismo con el gasoil que se vende a un menor precio en Buenos Aires.
Desde las refinerías se advirtió esta semana que el desfase en los precios de los combustibles es mucho mayor al alza que acaba de autorizarse. Según explicaron, la diferencia llegaba hasta el 20% en algunos productos, a raíz de los más de nueve meses que el precio de los combustibles permaneció congelado.
No obstante, desde el gobierno nacional se había advertido que la suba sería moderada dado que si bien se comprende la necesidad de las petroleras de mejorar sus ingresos para poder seguir con los planes de producción, no escapa al gobierno el impacto que el aumento de los combustibles genera en toda la economía.
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