Sandra Russo y sus cuentos ligeros en Bariloche

Los “Veintidós cuentos cortos y ligeros” de la periodista y narradora Sandra Russo son relatos que “hablan de rupturas amorosas” y son ligeros en los dos sentidos de la palabra.

Minutos antes de presentar su obra en la biblioteca Sarmiento de Bariloche, recomendó, en una charla con “Río Negro”, quitarle dramatismo a las relaciones afectivas y sus rupturas, y hasta incluso abordarlas desde el humor.

Russo cree que la situación del país y del mundo en general crean las condiciones para empezar a relativizar las cuestiones personales. Su mirada es pesimista, tanto en lo político como en lo referido al periodismo.

Luego de haber pasado por Expreso Imaginario, Humor y Página 12, varias radios y por 6 ,7, 8, Russo dejó las redacciones, los medios y el trabajo estable. “No hay mucho periodismo ni en Argentina ni en el mundo”, asegura.

Pero no extraña las redacciones y, en cambio, sueña con volver a la radio.

Tampoco la edición de libros es un medio de vida; apenas “un respaldo”. Hacia 2015 retomó el dictado de talleres, ahora enfocados a la “escritura creativa”.

Han desaparecido -a su juicio- los márgenes de libertad para que un periodista pueda desarrollarse y ya no se encuentran medios con restricciones que sean lo más parecidas posible a la conciencia de un periodista.

“El capital está concentrado y eso incluye a los medios. En España los dueños de los medios son los bancos”, advierte Russo, que llegó a Bariloche de la mano de la agrupación Participación y Movimiento.

Lo que ocurre es que la etapa que atraviesa el mundo “no es el capitalismo que analizó Marx, es un sistema de almas quebradas”.

Detesta Twitter: “hay que sea muy cínico o muy ingenioso para estar ahí”. Y ser refractario a las agresiones, además.

En cambio, utiliza Facebook de manera activa como si se tratara de su propio medio de comunicación.

“Veintidós cuentos cortos y ligeros”, fue editado por Sudamericana y -según la reseña- “revelan la potencia de una voz que captura como pocas la sensibilidad y el coraje del universo femenino. Una mujer que vislumbra en un naipe el fin de un amor; otra que se muda de la casa de sus sueños porque habita en ella el hombre de sus pesadillas; una periodista que debe enfrentarse a la difícil tarea de conciliar sus deseos profesionales con sus responsabilidades como madre; o una chica que se pasa las noches leyendo poesía en un sórdido bar de Constitución hasta que, gracias a un muchacho desconocido, descubre por primera vez el aleteo de las mariposas: los relatos que componen este libro exploran las vicisitudes de la maternidad, la amistad, el amor, el desamor”.