Río Negro revisará las 6.600 tarjetas escolares existentes

Son los pagos alimentarios remanentes del mecanismo incorporado en el 2020 cuando se cerraron los comedores. El gobierno ratificó que Desarrollo Humano centrará la asistencia y será exclusivamente para las familias vulnerables.

El gobierno provincial sostuvo parcialmente -en noviembre y diciembre- la acreditación de fondos -con la tarjeta Nutre- para la asistencia alimentaria de alumnos de las escuelas, después de la reapertura de los comedores, pero ya anticipó que ese mecanismo no se sostendrá en el 2022, concentrándose la respuesta estatal en el ministerio de Desarrollo Humano para “familias en situación socioeconómica vulnerable”.

En noviembre del 2020, esa cartera cumplía con unas 14.100 acreditaciones, cubriendo a unos 18.000 alumnos, mientras que en agosto pasado llegó a casi 26.000 tarjetas, con más de 36.000 estudiantes asistidos y depósitos que totalizaban unos 90 millones de pesos.

El programa, armado en la segunda parte del 2020 por el cierre de los comedores por la pandemia, consistía en aportes dinerarios a familias de alumnos para comprar alimentos. Se acreditaban 3.000 pesos por el primer niño a cargo y 1.000 pesos por hermano/a que concurrieran a escuelas. Además, se estableció un tope de 5.000 pesos, con tres niños escolarizados.

En octubre pasado, Educación reabrió sus comedores y el gobierno provincial se enfocó en regresar a la situación previa, es decir, el servicio escolar con los tradicionales comedores y, paralelamente, el área de Desarrollo Humano cumplir con el resto de la asistencia a los grupos necesitados.

Aún así, esa cartera acordó con Educación un período de transición -noviembre y diciembre- donde se sostendría las tarjetas cuando los alumnos beneficiarios no tuvieran comedores en sus escuelas. Para eso, el ministerio educativo informó de un listado de 6.659 titulares para seguir en los dos meses finales del 2021. Por eso, Desarrollo Humano renovó la contratación del servicio de Cabal por un total de 40 millones.

Asistencia escolar

36.000
alumnos y alumnas de Río Negro llegaron a tener depósitos para alimentos con la Tarjeta en agosto de 2020.
6.659
titulares de tarjetas escolares se mantuvieron en noviembre y diciembre, después de la reapertura de los comedores.

30.204
alumnos y alumnas que concurrían a los comedores de las escuelas, según el último registro de Educación.

Simultáneamente, el ministerio de Gobierno -hoy a cargo del área social por la ausencia de Juan José Deco- ratificó que la “tarjeta Nutre-Comedores Escolares llegará únicamente a aquellas familias que se encuentran en una situación socioeconómica vulnerable”.

Además, en una gacetilla, el gobierno rionegrino recuerda que el “objetivo de esta tarjeta era cubrir las necesidades alimentarias de los estudiantes que asisten a escuelas cuyos comedores escolares fueron cerrados a causa de la pandemia”.

Esta notificación ratifica la determinación gubernamental de concentrar la asistencia social en Desarrollo Humano, suspendiendo la cobertura por las demandas escolares. En esa línea, la comunicación oficial agrega que “todas las personas beneficiarias de la Tarjeta Nutre-Comedores Escolares que tengan alguna duda” se deben acercar a las delegaciones sociales de la Provincia en “cada región, donde se evaluará cada situación en particular”.

Según el último reporte de Educación, los alumnos asistidos por comedores de las escuelas superaban los 30.000, a partir de convenios con los municipios, salvo en siete donde la operatividad corresponde al ministerio. Ellos son Huergo, Cinco Saltos, Conesa, Roca, Fernández Oro, Bariloche y Sierra Grande.

El 18 de octubre, Río Negro puso en marcha el plan de reapertura de los comedores, con esquemas fijados a partir de los espacios de los establecimientos, como la ventilación cruzada y la presencia de las burbujas/cursos para garantizar las distancias exigidas.

Durante el 2021, Educación entregó 25.176 módulos de frutas frescas y verduras, a partir de un convenio firmado entre la Provincia y la Federación de Productores de Río Negro y Neuquén. Esa caja -que incluía también miel y frutas frescas- fue de 10 kilos y su distribución fue mensual, de mayo a diciembre, con una inversión de 312 millones de pesos mientras la cartera educativa también informó que los aportes a los municipios por “servicios de alimentación” llegó a los 701 millones de pesos.


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