Repudio de organizaciones de H.I.J.O.S tras el alegato de la defensa pública en el juicio «Escuelita» VII

La regional Bahía Blanca de H.I.J.O.S difundió un documento en el que planteó la «preocupación y repudio» de organizaciones de derechos humanos y de sobrevivientes de todo el país que siguen los juicios por los crímenes cometidos durante la dictadura por las expresiones de las abogadas defensoras en los alegatos expuestos en las audiencias la semana pasada.

En el escrito, se hizo un pormenorizado detalle de las frases que causaron alarma por considerarlas «negacionistas y estigmatizantes» por parte de las abogadas de la defensa pública Celia Delgado y Gabriela Labat, y luego señalaron que «el nivel de ofensa llegó al límite de comparar el juicio que se desarrolla en Neuquén con lo que se hacía en plena dictadura. La equiparación fue indicada como un discurso que señala posturas de negación sobre Terrorismo de Estado «pero adquieren una gravedad especial cuando provienen de funcionarias públicas» de la época democrática.

Consideraron que la Defensoría General de la Nación debía tomar medidas por las conductas que calificaron de graves y que eran «innecesarias para el adecuado ejercicio de la defensa de los imputados. Defender no es ofender«.

El juicio en Neuquén está en etapa final. El 17 de noviembre la audiencia de la defensa pública de Pablo Repetto y Sabrina Ascani Torres reanuda a las 9 y luego alegará el abogado particular Walter Tejada, quien defiende a su padre, Walter Bartolomé Tejada, jerarca del área de Inteligencia del Ejército en Bahía Blanca en 1976. Para el 25 de noviembre se fijaron las réplicas y dúplicas de las partes y ese día se conocerá la fecha de las últimas palabras de los imputados y del veredicto de los jueces.

Hijos e hijas de desaparecidos cuestionaron que a más de 15 años del inicio del enjuiciamiento a genocidas, con casi 270 sentencias de lesa humanidad en todo el país «poner en duda dónde se encuentran las personas desaparecidas de Neuquén, sugiriendo que pueden estar en cualquier lugar, recuerda las peores manifestaciones del genocida (Jorge Rafael) Videla y su miserable «son una incógnita», que ya creíamos superado«.

Plantearon que las manifestaciones vertidas en el alegato de la defensa pública que tiene a su cargo la asistencia de 9 de los 15 imputados «agravian profundamente a familiares, sobrevivientes y víctimas, sin que aporten nada al derecho de defensa en juicio de sus asistidos». Agregaron que las y los sobrevivientes de las cárceles y centros clandestinos de la dictadura «venimos sembrando en paz y pacientemente Memoria, Verdad y Justicia» pese a los discursos del odio y la negación.