Repudian tres casos de violencia de género por parte de policías en Río Negro
La asamblea Ni una menos exigió la separación de los policías acusados y repudió los traslados a otras localidades.
La Asamblea Ni Una Menos repudió el caso de violencia de género y abuso en el que se investiga al comisario Roberto Parra, a cargo de la Comisaría 27 del barrio Melipal.
En la denuncia, una agente de la misma institución denunció que el hecho ocurrió cuando se encontraba trabajando. “Abuso sexual agravado por haber sido cometido con penetración, por un efectivo policial en ejercicio y en un contexto de violencia de género”, consta en la denuncia de la víctima.
El Ministerio Público Fiscal realizó la formulación de cargos y el denunciado está detenido con prisión preventiva. Ya fue separado de su cargo, con congelamiento de haberes.
«El caso reviste suma gravedad, puesto que el agresor y la víctima pertenecen a una institución estatal cuya función es bregar por la seguridad y los derechos de los ciudadanos. Más aún porque el ataque fue cometido en horario en que se encontraban en funciones, con el agravante de los cargos jerárquicos y sus implicancias», plantearon desde la institución.
Destacaron que «resulta seriamente preocupante y de mayor gravedad que este hecho aberrante sucede a menos de un mes de otros dos hechos ocurridos en Río Negro». En Allen, tres policías fueron detenidos, acusados de privación ilegítima de la libertad y violación a una joven que también realizó la denuncia de manera inmediata luego del ataque sufrido.
En General Roca se registró otro hecho de abuso sexual en el que un efectivo policial abusó sexualmente de su pareja, también agente de policía, intimándola con una navaja.
Tomamos también conocimiento de otro hecho ocurrido en Fiske Menuko en este último tiempo, en que un Comisario fue denunciado por su ex pareja por violencia de género.
«¿Qué hizo la institución ante estos hechos? Le sacó el arma reglamentaria, y fue designado días después para asumir la conducción de la comisaría 48 de Mosconi, lo cual provocó justificado repudio y rechazo de la sociedad a través de redes sociales», cuestionaron y agregaron: «En pos de seguir cuidando al violento, lo trasladaron a otra ciudad, Bariloche. Prácticas similares tiene la iglesia católica, cuando traslada a los curas abusadores de lugar en lugar para protegerlos y protegerse».
Desde la asamblea, resaltaron «la falta de perspectiva de género existente en las comisarías de nuestra localidad, manifiesta cuando las mujeres se acercan a realizar una denuncia por violencia de género y son re-victimizadas».
«Lo sabemos porque desde nuestra organización acompañamos a muchas de ellas y escuchamos sus relatos. Creemos que no hay Ley Micaela que alcance a modificar prácticas patriarcales profundamente arraigadas, cuando en las instituciones mismas se cometen estos casos de violencia extrema y abuso de autoridad hacia las mujeres y las diversidades», señalaron.
Expresaron su apoyo a las víctimas y exigieron el cuidado de su integridad física y emocional, «especialmente la salud de quien denunció al oficial Parra, sabiendo el miedo y el peligro que genera denunciar a funcionarios con poder. No está sola. Estamos para visibilizar la injusticia y la violencia patriarcal».
Finalmente, exigieron «celeridad en la investigación, juicio justo y con perspectiva de género y cárcel común a los policías abusadores».
Comentarios