Quién es Alejandro Gravier, el marido de Valeria Maza que recibirá un pago millonario del municipio de Bariloche
Su nombre no es nuevo para la región; desde hace varios años está ligado a la localidad cordillerana. A qué se dedica actualmente y cuáles son sus negocios.
El empresario Alejandro Gravier tiene 61 años y desde 1998 está casado con Valeria Mazza.
Ayer se conoció la noticia de que Alejandro Jorge Gravier, el marido de la exmodelo y conductora Valeria Mazza, recibirá unos 500 millones de pesos de la municipalidad de Bariloche por unas tierras en el Cerro Otto que eran de su propiedad y le fueron expropiadas en el 2012 para la construcción de un barrio social. Su nombre no es nuevo para la región; desde hace varios años está ligado a la localidad cordillerana. La familia visita habitualmente la ciudad en cada temporada de invierno. Tanto el matrimonio como los hijos son experimentados esquiadores en las pistas del cerro Catedral y la foto del grupo posando en la nieve, con la ropa de ski y el cerro detrás viste, cada año, las páginas de las publicaciones de celebrities del país. Pero quién es Alejandro Gravier, a qué se dedica actualmente y cuáles son sus negocios.
Gravier fue uno de los socios fundadores, junto a su esposa, de VAMAGRA GROUP, una empresa ligada a la industria del entretenimiento. Esta sociedad creada en 1995 no sólo representó a la modelo en todo el mundo sino que además desarrolló distintas producciones artísticas y televisivas tanto para el mercado argentino como el italiano.
Alejandro tiene 61 años y en el sitio oficial de su empresa se presentaba como «simpatizante de San Lorenzo, aficionado al polo y gran esquiador». Con Valeria Mazza se casaron en 1998 y tienen cuatro hijos: Balthazar, de 24 años; Tiziano, de 21; Benicio, de 18; y Taína, de 15. Allí se definió como un empresario focalizado en «identificar y desarrollar negocios en la Industria de Real Estate en Latinoamerica«, o sea en bienes raíces o propiedad inmobiliaria.
Gravier nació en Buenos Aires en 1965. Es integrante de las clases más acomodadas del país y, como tal, estudió en el tradicional Colegio Marianista y luego, administración de empresas en la Universidad Católica Argentina (UCA). Jugó al Rugby en el San Isidro Club (SIC) e integró el seleccionado juvenil de Rugby (“pumitas”) en 1980.
En 1987, en sociedad con Sevel Argentina, fundó una red de talleres mecánicos para automóviles Fiat y Peugeot que se llamó “Pronto Servicio” y que según la información oficial «revolucionó el concepto de servicio para la época».
En los ´90, ya contaba con una importante infraestructura de 12 barcos, 1 hormigonera y más de 40 camiones lo que le permitió ser proveedor y subcontratista del Estado en proyectos tales como Autopistas del Sol, Acceso Oeste, Bs.as.-La Plata, Ricchieri, ensanche General Paz, Circunvalación Rosario, Puente Encarnación-Posadas y obras como represa Uruga-I, gasoducto Loma de la Lata, además de una centena de obras privadas. En 1998, vendió la empresa al poderoso Grupo Loma Negra.
También incursionó en el negocio de Internet. «Alejandro y Valeria se inscriben como socios fundadores de El Sitio.com, la primer empresa Argentina en llegar a consolidar un IPO con éxito y llegar a cotizar en Nasdaq. En el 2008, se asoció y creó DESA, la filial Argentina de Ducati energía Spa», puede leerse en la web del grupo. Dicha página está on line pero no figura como activa en las redes sociales.
Sus negocios no sólo han estado vinculados a la industria del entretenimiento sino también al mercado inmobiliario de lujo. En el 2010, asesoró al Grupo Español Rayet y se vinculó para proyectos de Real Estate en Sudamérica, siendo el complejo Selenza Village + Hotel & Spa Punta del Este.
Alejandro Gravier y un pago millonario del muncipio de Bariloche
Alejandro Jorge Gravier, el esposo de la exmodelo y conductora Valeria Mazza, es uno de los propietarios de las tierras expropiadas por la Municipalidad de Bariloche años atrás, al pie del cerro Otto, donde se edificó un barrio social y por el que ahora se deberá pagar unos 500 millones de pesos.
La semana pasada el gobierno del intendente Gustavo Gennuso ratificó un acuerdo de pago con los propietarios de las 26,5 hectáreas en la ladera sur del cerro Otto, en el barrio El Frutillar, que fueron expropiadas en la gestión del exintendente Omar Goye en 2012, aunque las gestiones las inició el radical Marcelo Cascón.
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