Murió Shannen Doherty, tras mostrar su larga lucha contra el cáncer
Shannen Doherty ganó popularidad por sus personajes en Beverly Hills 90210 y Charmed. La actriz había mostrado su larga batalla contra el cáncer en sus redes sociales.
Shannen Dohery murió este domingo por la madrugada.-
La actriz Shannen Doherty murió durante la madrugada de este domingo, a los 53 años, tras largos años de tratamiento contra un cáncer metastásico. La información fue confirmada en las últimas horas por Leslie Sloane, publicista de la artista.
La estrella de Beverly Hills 90210 y Charmed había confirmado meses atrás que se estaba «preparando para morir», dado que había tenido cáncer en 2015 y la enfermedad volvió a su cuerpo hace poco menos de cuatro años, por lo que se encontraba bajo tratamiento médico.
El largo tratamiento de Shannen Doherty contra el cáncer, que ella eligió mostrar en redes sociales
Luego de participar de éxitos como Charmed, Shannen Doherty contó a sus seguidores que tenía cáncer, una enfermedad que trató inicialmente en 2015 y remitió, pero que se reactivó en 2020 y le generó una metástasis que ocupó su cuerpo entero.
Entonces, las redes sociales se volvieron como un diario de la actriz de Hollywood para mostrar cómo convivía con la enfermedad durante los últimos años, intentando dar un mensaje positivo sobre enfrentar el cáncer con actitud. De hecho, una de las últimas publicaciones de Shannen Doherty sobre su salud hacía mención a la intervención a la que debió someterse para que le retiren un tumor en la cabeza, en enero de 2023.
«No hice suficientes preguntas, el miedo y las demasiadas cosas que estaban sucediendo simplemente se apoderaron de mí» contó sobre esa experiencia la actriz, quien también agradeció el trabajo del equipo médico para sobrevivir a esa instancia.
Prepararse para morir: la fuerte confesión de Shannen Doherty
Meses atrás, Shannen Doherty habló sin tapujos sobre su enfermedad y señaló que «mi prioridad es mi madre. Se que va a ser muy duro para ella si yo muero antes. Y porque sé que va a ser duro, estoy intentando que muchas otras cosas le resulten más fáciles. No quiero que tenga que encargarse de un montón de cosas, no quiero que se encuentre con un trastero lleno de muebles».
Doherty sabía desde hacía más de un año que el cáncer que la afectaba había alcanzado su cerebro, donde tenía metástasis, y además la enfermedad había llegado también a sus huesos. El diagnóstico era cáncer en estadio IV o metastásico, una enfermedad que no tenía cura y ella lo sabía.
“Sientes que estás soltando algo que fue muy especial e importante para ti. Pero sabes que es lo que debes hacer… y, al final, va a darte cierta sensación de paz y de calma. Porque estás ayudando a la gente que se va a quedar a tener una transición más limpia y más sencilla” había hablado Shannen sobre su inminente partida.
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