Kate Middleton y la reina Camila enfrentadas por el poder: caos en la Corona Británica

La princesa de Gales y la reina consorte se disputan su protagonismo, mientras no hay buenas noticias respecto de la salud del rey Carlos III.

La Casa Real Británica no pasa su mejor momento: a pesar de que Kate Middleton anunció su completa recuperación del cáncer, preocupa el estado de salud del rey Carlos III, también con un cuadro que lo afecta fuertemente. En ese contexto, la relación entre la esposa del príncipe Guillermo y la reina consorte Camila del Reino Unido pareciera estar muy tirante. Los detalles.


Caos en la Corona Británica: la mala relación entre Kate Middleton y Camila


Fuentes de la Corona Británica aseguran que la guerra que separa a la princesa de Gales y a la esposa del rey Carlos III está atravesada por varias aristas: además de la disputa por los roles protagónicos, la relación de ambas estaría dividida por conflictos que se vinculan con el futuro control de la monarquía.

Es que Camila, actual reina consorte, busca consolidarse como la figura central de la monarquía británica junto al rey Carlos III, a pesar de su delicado estado de salud. Por esa razón, habría desaprobado acciones de Kate Middleton en pleno tratamiento por su cáncer.

La segunda esposa del rey habría reprochado a Kate Middleton un viaje secreto a Estados Unidos, para recibir un tratamiento oncológico del que ni Carlos ni Camila sabían nada. Además, el reclamo también habría incluido una reunión con Harry, el duque de Sussex y cuñado de la princesa de Gales.

La batalla entre Kate Middleton y su suegra, la reina Camila, tendría foco en la importancia de sus roles reales en caso de que Carlos III muera. Es que la princesa de Gales se prepara para ser la próxima reina, cuando se corone a William, dejando atrás para siempre a Camila en su rol de reina consorte.


Caos en la corona británica: la reunión entre Kate Middleton y el príncipe Harry que generó malestar


Así, la pelea entre Camila y Kate Middleton se habría enfocado un un supuesto encuentro privado entre la princesa de Gales y el duque de Sussex, a pesar de que esta reunión y el viaje fue desmentido oficialmente por la Casa Real británica.

Supuestamente, la reunión secreta entre los cuñados habría tenido lugar en Houston, Estados Unidos, donde él se acercó para retomar el contacto con la familia real. Este gesto no habría caído bien a la reina consorte, quien consideró que ella y el rey Carlos III habían sido traicionados.

Sin embargo, días atrás trascendió que el rey Carlos III había llamado a Harry para empezar a proyectar sus próximos funerales, dado su complejo estado de salud. En esa conversación, le habría pedido que no asista con Meghan Markle, su actual esposa.


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