Cómo hacer: trucos para que la cebolla no me haga llorar
Es un ingrediente infaltable en las recetas pero puede ser incómodo el momento en el que nos hace llorar. Lo que tenés que saber.
La cebolla es un ingrediente que no puede faltar en la cocina, a la hora de preparar distintas recetas. Sin embargo puede resultar incómoda a la hora de cortarla porque produce un lagrimeo molesto.
Aunque es difícil evitar completamente el fenómeno, existen algunos trucos para minimizar las molestias que la cebolla puede ocasionar. A continuación, los métodos para cortar la cebolla y que no te haga llorar.
Métodos para que la cebolla no me haga llorar
Cortar adecuadamente
La forma en que se corta la cebolla puede influir en la cantidad de gases irritantes que se liberan. Por eso es recomendable cortar la cebolla en rodajas finas en lugar de cortes gruesos. Además, es esencial contar con un cuchillo bien afilado.
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Congelarla parcialmente
Poner las cebollas en el freezer también puede ser una solución para evitar llorar al cortarlas. Antes de comenzar a cortarla, es necesario dejarlas en el freezer entre 15 y 30 minutos. Este proceso no solo ralentizará la liberación de compuestos irritantes, sino que también facilitará el proceso de corte al mantener la cebolla más firme.
Agua y ventilación
Otra forma de evitar las lágrimas es mojar tanto las cebollas peladas como el cuchillo en agua. Así se elimina una parte de los gases que libera el vegetal y se lagrimea menos. Por otro lado, es importante contar con una ventilación adecuada en la cocina. Encender el extractor de humo o abrir una ventana son prácticas que permiten dispersar los vapores irritantes de la cebolla.
Con información de La Nación
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