Aseguran que «la muerte» pasó por la coronación del rey Carlos III

Más de dos millones de personas siguieron en vivo la coronación del rey Carlos III y su esposa Camilla, en la Abadía de Westminster, Londres. Un evento único en toda Europa, ya que el Reino Unido no vivía una asunción de estas características desde hacía 70 años. Así, las miradas no dejaron escapar a un curioso evento que se habría registrado en las puertas de la reconocida catedral londinense.

Según indicaron los seguidores del evento en redes sociales, las imágenes fueron captadas por las cámaras que mostraban en vivo y en directo la retirada protocolar de algunos de los guardias que se encontraban en uno de los salones donde se celebraba la ceremonia.

Así, mientras los hombres se trasladaban, se registró la imagen de una curiosa aparición que podría anticipar algún mal augurio para la corona británica.

Es que en el video se observa a una supuesta persona que pasa de lado a lado, vestida con una túnica negra, encapuchada y con un bastón largo, cruzando por delante de la puerta que habían atravesado los guardias unos segundos antes.

Curiosamente, esa figura no ingresa al evento sino que sigue su camino por afuera de las instalaciones, donde además acompañaba una fuerte tormenta que afectó al público presente en el lugar.

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Las redes estallaron por la aparición de «la parca» en la coronación del rey Carlos III

Apenas detectaron el insólito momento, la imagen estalló en redes sociales e inmediatamente se la asoció con «la parca», la figura vinculada a la muerte. En ese contexto, las teorías conspirativas volvieron a copar las conversaciones.

“¿Alguien más acaba de ver a La Parca en la Abadía de Westminster?” escribió uno de los primeros en compartir el video. “¡Lo noté! ¿A quién está buscando?” replicó un seguidor; “Es como una escena de Exorcist 3″ sumó un tercero.

Algunas personas que intentaron explicar lo que sucedía señalaron que podría tratarse de un monje o uno de los maestros de ceremonias que guiaban a los invitados, cubierto como consecuencia de las incesantes lluvias que se registraban en Londres el sábado.