Receta con historia: los pancitos caseros de Mariana

Pan casero, pero hecho en porciones individuales, para disfrutar a la hora del desayuno o de la comida. Una propuesta fácil y riquísima de Mariana, una lectora de Roca. Escribinos tu receta a quedateencasa@rionegro.com.ar. Nosotros la publicamos.

Esta receta tiene historia. Es la de mi mamá amasando, las mañanas de los sábados, para que desayunáramos pan calentito cuando nos levantábamos.
Los hacía ese día porque nos dejaban dormir un poco más los sábados, porque no había que ir al colegio, y porque podíamos ayudar en la chacra un poco más tarde.


Mamá hacía los panes en tamaño chico porque decía, rendía más. Como sea, nos comíamos tres o cuatro cada uno, calentitos, con la manteca que se derretía y el dulce casero que hubiera en ese momento.
Extrañaba el olor de esos panes cuando me fui a estudiar a La Plata. Y era lo que pedía que me hiciera cuando volvía de visita en mis años de estudiante.


Me gustaba, cuando llegaba en colectivo desde la Plata, saber que mi mamá me esperaba con esos pancitos. Ella los envolvía en un repasador para que se mantuviera el calorcito.
En estos días de cuarentena y encierro, volví a hacerlos.
Tenía la receta guardada en un cuaderno, con su letra, y decidí que era un buen momento para compartirla, no sólo con mis hijos, sino con los lectores, que también se quedan en la casa y pueden tomar ahora la costumbre de amasar el pan, aunque sea los sábados o domingos.

Pan Casero
1 kg. de harina 0000
600 cm2 de leche tibia
2 cucharadas soperas de azúcar
50 gr. de levadura
4 cucharadas soperas de aceite
1 cucharada sopera de sal.
En un bowl mezclar la levadura, la leche tibia, el azúcar y el aceite. Dejar diez minutos hasta que se haga el fermento. Agregar la harina y sal. Amasar y dejar reposar hasta que duplique el tamaño, tapado para que no le de aire.
Hacer bollitos con la mano, acomodarlos en una fuente y dejar leudar.

Llevar a horno medio por 10 minutos. Están listos cuando abajo están arriba blancos y abajo apenas tostados.


Esta receta tiene historia. Es la de mi mamá amasando, las mañanas de los sábados, para que desayunáramos pan calentito cuando nos levantábamos.
Los hacía ese día porque nos dejaban dormir un poco más los sábados, porque no había que ir al colegio, y porque podíamos ayudar en la chacra un poco más tarde.

Registrate gratis

Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento

Suscribite por $2600 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Certificado según norma CWA 17493
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales
<span>Certificado según norma CWA 17493 <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios