Histórica victoria de Racing en el clásico ante Independiente
Con gol de Marcelo Díaz superó 1-0 al Rojo en el Cilindro, en un derby tan emocionante como accidentado. El equipo de Sebastián Beccacece aguantó casi todo el ST con 9 hombres hasta el gol del chileno a 5' del final. Los de Pusineri también sufrieron las expulsiones de Cecilio Domínguez y Lucas Romero en el cierre.
Marcelo Díaz le dio la épica victoria a la Academia ante su clásico rival.
Histórico, épico, inolvidable para sus hinchas y también para los vecinos del barrio. Racing se quedó con el clásico de Avellaneda al vencer 1-0 a Independiente después de jugar todo el segundo tiempo con 9 hombres.
La Academia ganó un partido impensado con el gol del chileno Marcelo Díaz a los 40 minutos del complemento tras jugar más de un tiempo disminuido numéricamente por las expulsiones del arquero neuquino Gabriel Arias (39’ PT) Leonardo Sigali (1’ ST).
El Rojo, que nunca le encontró la vuelta al partido y sufrió el primer golpe emocional del ciclo de Lucas Pusineri, también terminó con nueve por las expulsiones del paraguayo Cecilio Domínguez (44’ST) y Lucas Romero (51’ST).
El primer triunfo de la era Sebastián Beccacece en Racing será inolvidable para él por su pasado reciente, y para todo el mundo académico ya que superó al rival de toda la vida de una manera soñada, en un clásico emocionante, caliente y lleno de polémicas.
La victoria, además del tinte heroico, fue merecida porque Racing fue superior cuando el partido se jugó en igualdad de condiciones y fue el equipo que más peligro generó en el arco contrario.
El chileno Díaz, referente del campeón vigente del fútbol argentino, quedó como la figura por el gol, pero el equipo tuvo muchos puntos altos en el ingresado Javier García, quien tapó dos pelotas muy difíciles, en Iván Pillud y en Leonel Miranda.
Independiente fue la contracara porque desde el principio la postura del equipo de Lucas Pusineri fue acoplarse en su campo y apostar a un contraataque con la velocidad de los extremos, pero le costó mucho recuperar la pelota.
El Rojo jugó más de un tiempo con dos jugadores más y nunca pudo imponer las condiciones a un rival diezmado en lo numérico pero superior en lo anímico y actitudinal.
Pusineri también quedó algo expuesto por los cambios que realizó en el segundo tiempo y luego de un buen arranque de ciclo, ahora tendrá que recuperar anímicamente y también futbolisticamente a un equipo golpeado por una derrota insólita e inesperada.
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