Vivir entre San Martín de los Andes y el lago Lolog

-Cómo imaginás tu casa? Que no puede faltar?

-Un atelier con buena vista.

Así arranca la conversación que meses más tarde convertirían las palabras en ladrillos y conformarían esta nueva casa para una artista regional.

Para muchos, la imagen de la Patagonia se resume en nieve y un lugar cálido frente al fuego, que no puede faltar.

La magia de la Patagonia representa el sueño de una vida distinta, por lo menos para esta artista, que decidió vivir en San Martin de los Andes, entre la ciudad y el lago Lolog.

En esta época del año la bruma baja de la mañana lentamente da paso a las heladas y nevadas, que todo cubren de blanco. El paisaje se impregna de ocres y rojos.

La elección del lote partía de las siguientes premisas : naturaleza en estado puro, vistas, colores que van cambiando a lo largo de las estaciones y tranquilidad para poder pintar. Sumado a estos atributos naturales, la casa buscaba: un espacio cálido y confortable; no sólo para poder pintar, sino para invitar amigos y familia.

“De estas necesidades se va dibujando un esquema funcional: un gran espacio integrado para living cocina y comedor, hacia un lado un dos cuartos para visitas y hacia el otro la suite principal, esta última comunicada con el atelier de la dueña”, comentan los arquitectos de Estudio 73, quienes llevaron a cabo este proyecto.

Entorno

Un terreno rectangular con vistas que se abren en su sentido longitudinal obligan a pensar en una implantación que se va quebrando, buscando ubicar la casa de acuerdo a entorno y orientación. Esto da como resultado un desarrollo en planta baja con vistas enmarcadas desde cada espacio, con ventanales y jardines de invierno a ambos lados para aprovechar las horas de sol en distintos momentos del día. El acceso a la vivienda está prolijamente logrado, con un equilibrio entre jardín y árboles que recorren el bosque autóctono hasta el semicubierto de acceso.

El paisaje no podría haberse integrado mejor, con la ayuda de una paisajista se logró resaltar la vegetación autóctona creando visuales únicas que mimetizan la construcción con naturaleza cruda.

Eficiencia energética

La casa, construida con hormigón y ladrillos tiene aislación de poliuretano, no sólo en el techo sino en todas las paredes laterales, aumentando considerablemente su eficiencia en aislación térmica. Todas las aberturas son de PVC con vidrio doble, minimizando la pérdida de calor. La calefacción es por piso radiante, regulando independientemente cada ambiente para mayor confort. Cuenta con dos estufas a leña- una en el living y otra en el atelier, que si bien no son necesarias para calefaccionar la casa se prenden para brindar calidez en invierno.

El techo del atelier es vivo, de pasto, esto ayuda a no perder temperatura en este espacio.

Los techos de vidrio en el living, y baño están orientados hacia el norte, maximizando la ganancia solar en invierno.

Producción: Horacio Lara

hlararionegro.com.ar

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Un pequeño jardín que incursiona en el interior de la casa, todo un hallazgo vital y estético.

La artista en su morada, tal como ella la soñó.

La funcionalidad es una ley, acá: priman los espacios lógicos, cómodos y esperados para habitar.