Prefiero cocinar pulpos para estos días de fiestas
Máximo Afione, el cocinero de “López” en Roca, comparte sus preferencias a la hora de celebrar.
Prefiero cocinar pulpos para estos días de fiestas
Máximo Afione, el cocinero de “López” en Roca, comparte sus preferencias a la hora de celebrar.
Prefiero cocinar pulpos para estos días de fiestas
Máximo Afione, el cocinero de “López” en Roca, comparte sus preferencias a la hora de celebrar.
Fotos: Julieta Krischak
Por Máximo Afione (*)
Las fiestas de fin de año normalmente las paso en Sintra, Portugal -donde nací- o en la Patagonia -donde crecí y pasé gran parte de mi vida-. Obviamente cada lugar tiene sus tradiciones. Allá en Sintra es tremendo el frío en invierno y acá en Argentina pasamos las fiestas en pleno verano, lo que lleva a que la comida sea bastante diferente. Allá bacalao, pulpo y lechón; acá vitel tone, asados y cosas bien frescas. Motivo por el cual me tiro a cocinar un poco de cada cosa.
Una es un pulpo en referencia a mi país de origen. Por otro lado, un cordero típico de la querible Patagonia.
Al pulpo lo hago bien al estilo del norte lusitano. Al horno y lo termino con un sutil confitado. Lo presento con unas verduras y una espuma de vieiras. El pulpo es muy tradicional en Portugal y se encuentra en casi todas las mesas en las épocas navideñas.
La paleta de cordero la hago bien clásica. Corto verduras, las pongo en una placa alta, le agrego un buen vino y después de dorarla bien la braseo un par de horas. La presento con pesto a cuchillo y unas papas dominó con criolla.
La tarta de manzanas es una receta de BÉ, mi mamá y gran cocinera en Portugal. La presento con frutos del bosque frescos y con crema. Es riquísima, tiene una base bien húmeda de manzanas verdes y rojas y una masa súper crocante por encima.
Me encanta la Navidad. Me parece un momento en el año que uno la pasa bien junto a su gente. Por mi parte, la celebro de dos maneras particularmente diferentes, ya que en Sintra, al ser invierno es tranquilísimo. Me junto con mi familia temprano, comemos bien, repartimos los regalos, muchas veces antes de las 12, chocolates café y tasa taza, cada uno a su casa. Acá es otra cosa. Normalmente vamos a Neuquén donde esta buena parte de mi familia Afione. Buenos banquetes. Hay platos que no faltan como el keppe de mi tío Eduardo, los niños envueltos de mi tía Ana Rosa, un buen cordero y después del brindis y los regalos siempre se sigue la fiesta hasta tarde.
(*) Cocinero de “López”, en Roca
Fotos: Julieta Krischak
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