Río Negro prevé obras para este año por 215 millones de dólares
El presupuesto formaliza la salida definitiva del Estado Nacional, pero hay un fuerte financiamiento de distintos organismos extraprovinciales.
El pasado fue un año atípico en la ejecución de las obras públicas, a partir del gran impacto en los costos por la devaluación de fines del 2023 y, además, por el retiro definitivo de la Nación, vía la suspensión del financiamiento a las Provincias o, directamente, con los municipios.
Esta condición no parece que se modificará en el 2025. Obras Públicas descree de esa posibilidad y su ministro Alejandro Echarren tiene una referencia puntual. La Nación no cumplió nada de lo acordado en julio del año pasado con Río Negro, con firma de convenios con el gobernador Alberto Weretilneck. En esa ocasión, las partes definieron qué hacer con las 74 obras con financiamiento nacional y paralizadas desde el 2023. Los funcionarios de Javier Milei prometieron la reactivación de las ejecuciones viales (las rutas 22, 23 y 151, como también, rotonda 22 en Choele Choel y la reparación de la 40).
El compromiso directo con la Provincia consistía en la continuidad de construcciones escolares iniciadas y financiamiento compartido para la conclusión de tres planes de viviendas, previendo un aporte nacional de 681 millones para 31 unidades distribuidas en Sierra Colorada, Lamarque y Fernández Oro. Esos aportes no llegaron a Río Negro y, obviamente, esos trabajos siguen sin retomarse.
La Provincia asumió exclusivamente concluir el Hospital de Bariloche (que tenía un convenio de ejecución conjunta) y, además, tres edificios de Jardines de Infantes (en Viedma, el Integrado de la Escuela 42 de Roca y otro en Pasaje Ferrari en Cipolletti).
La definitiva salida de la Nación -salvo las transferencias por leyes nacionales específicas- y las prioridades fijadas por la Provincia conforman el núcleo de las previsiones formalizadas en el presupuesto para el 2025.
En números, Río Negro prevé destinar algo más de 227.000 millones en obras públicas, es decir, unos 215 millones de dólares.
En el origen de los recursos, 121 millones -un 53 por ciento- son aportes externos, mayormente del Banco de Desarrollo de América Latina y El Caribe (CAF) y, después, del Fondo Fiduciario Federal de Infraestructura Regional (FFFIR).
Por créditos acordados, el CAF otorgará unos 140 millones de dólares en Río Negro para distintas construcciones. Los desembolsos son progresivos y, por eso, la previsión para este año figura con unos 86.851 millones de pesos (unos 82 millones de dólares).
Esta partida para el 2025 se concentra en nueve municipios, liderados por Sierra Grande, con más de 27.000 millones, destinados a proyectos del “Polo energético y logístico de Sierra Grande”, con “obras de infraestructura” en Punta Colorada y en Playas Doradas, como también, “recambio de cañerías y cisternas” en Sierra Grande.
Comprende, además, los planes directores de aguas de Roca (20.646 millones), de Las Grutas (11.470 millones), de El Bolsón (8.191 millones), de Río Colorado (2.000 millones) y de Dina Huapi (1.301 millones). Figuran la “cobertura de agua potable zona sur-Lago Gutiérrez”, en Bariloche (5.726 millones); y la “planta potabilizadora” de Cipolletti (5.161 millones).
Incluye dos construcciones viales: las repavimentaciones al aeropuerto de Bariloche (2.245 millones) y a la aeroestación de Viedma (2.675 millones).
Por su parte, el financiamiento del FFFIR suma 34.700 millones y se corresponde con las obras de repavimentaciones de las rutas 6 y 8, ya adjudicadas a CN Sapag y Centro Construcciones, y se estima el inicio de ejecución para febrero.
Además de las asistencias de la CAF y de la FFFIR, el tercer esquema se compone de casi 44.000 millones de Rentas Generales, es decir, puntualmente de recursos propios asignados. Significa un 19 por ciento del total de financiamiento programado.
Esa nómina informada a la Legislatura se compone de 85 construcciones programadas, entre ellas, figuran las finalizaciones del hospital Carrillo de Bariloche (6.845 millones), la “Ciudad Judicial” de Cipolletti (3.497 millones) y el organismo central del Ipross en Viedma (1.094 millones), que pertenecía al Plan Castello.
También, en los montos más importantes, se presupuestaron fondos para los hospitales de Cinco Saltos (5.423 millones), de Dina Huapi (1.440 millones), de Fernández Oro (1.213 millones) y de Chimpay (1.200 millones).
La mayor inversión
- $29.000
- millones se destinarán a diferentes obras programadas en Sierra Grande.
Otras partidas contemplan el inicio de la Terminal de Ómnibus de Bariloche (3.000 millones), la repavimentación de la ruta 65 en Cipolletti (1.262 millones), el riego de Colonia Josefa (1.200 millones) y “obras de urbanización” de Villa Regina (1.069 millones).
El reparto de Rentas Generales es bien amplio, con reservas menores (unos 100.000 pesos), y el gobierno provincial compromete construcciones en todas direcciones.
Los restantes recursos se vinculan -mayormente- con reservas específicas, como transferencias de fondos de viviendas (Fonavi), con 33.741 millones; de obras para Turismo (6.613 millones); para Educación (14 proyectos por 3.800 millones), para Energía (con 3.040 millones) y, entre otros, para gas (13 construcciones por 1.544 millones, concentrados en El Bolsón y Mainque).
El reparto entre los municipios y la primacía de Sierra Grande
Un análisis de la distribución por los municipios ofrece siempre una referencia obligada.
Un cálculo global indica que el gobierno de Río Negro, según el presupuesto fijado, reservó casi 370.000 pesos por rionegrino para la construcción de obras en el 2025.
En el ranking de municipios, Sierra Grande lidera con casi 29.000 millones, a partir de la ejecución de construcciones públicas frente a las inversiones energéticas programadas. Un financiamiento central corresponde al Banco de Desarrollo de América Latina y Caribe (CAF) para infraestructura para el Polo Energético y Logístico, con una partida crediticia de 27.000 millones. Esa asignación extraordinaria arroja una relación de 3,2 millones por cada serrano.
Luego, entre los municipios mayores, Bariloche y Roca superan los 23.000 millones, arrojando casi 172.000 pesos y 213.000 pesos por habitante, respectivamente.
Un dato político del 2025 radica en la buena ubicación en la distribución del municipio roquense, gobernado por la justicialista María Emilia Soria, aunque su partida se concentra en el plan director de agua potable (iniciado por el Enhosa que se paralizó y, en la gestión de Javier Milei, fue cancelado el programa). Son 20.000 millones del crédito del CAF, pero el proyecto se incluye a propuesta del gobierno provincial.
Por su parte, Viedma supera los 15.000 millones y Cipolletti se aproxima a ese monto, con promedios de 254.000 y de 142.000 pesos por vecino. Después, Regina cae a unos 55.000 pesos.
Allen -sexta ciudad- tiene un promedio inferior, con 17.000 pesos por poblador. Su municipio está liderado por libertario Marcelo Román. En contrapartida, esa administración local consiguió convenios y promesas de financiamiento de Nación.
En el grupo de municipios de entre 20.000 a 30.000 habitantes, el más beneficiado es San Antonio (530.000 pesos/hab) y lo sigue El Bolsón (454.000 pesos). La relación es menor para Cinco Saltos (261.000 pesos) y peor para Catriel (14.400 pesos).
En la franja de 10.000 a 20.000 pobladores, lidera Fernández Oro, con una media de 160.000 pesos por habitante. Continúa con Río Colorado, con 156.000 pesos, mientras Choele Choel cae a 77.000 pesos.
Dina Huapi figura en el décimo lugar, aunque lidera el ranking de los municipios de 5.000 a 10.000 habitantes. Su asignación equivale a unos 557.600 pesos por poblador. Entre sus pares, lo siguen Conesa (155.000 pesos), Jacobacci (147.000 pesos), Luis Beltrán (96.000 pesos), Cervantes (61.000 pesos), y Huergo (52.000 pesos).
En el rango inferior a los 5.000 habitantes, Pomona despunta con una asignación de 4.735 millones, que es la novena mayor entre la totalidad de los municipios. Comprende el riego de Colonia Josefa (1.200 millones). Esta partida se transforma en la mayor en su relación por la población, pues cada uno de sus 1.100 vecinos tiene un equivalente a 4.735.000 pesos para construcción.
Un equivalente, como Ramos Mexia, tiene un promedio alto en su grupo, llegando a los 1.092.000 pesos. Mayores, pero menos beneficiados, figuran Comallo (532.000 pesos), Maquinchao (455.000 pesos), Los Menucos (370.000 pesos), Chimpay (también 370.000 pesos), Mainque (257.000 pesos) o, entre otros, finalmente, el gobierno radical de Chichinales (con 48.000 pesos) y el justicialista de Lamarque (con 24.000 pesos).
El último municipio por su monto es Darwin. Tiene una previsión de casi 129.000.000 pesos y unos 1.500 habitantes, es decir, la relación es de 86.000 pesos.
El pasado fue un año atípico en la ejecución de las obras públicas, a partir del gran impacto en los costos por la devaluación de fines del 2023 y, además, por el retiro definitivo de la Nación, vía la suspensión del financiamiento a las Provincias o, directamente, con los municipios.
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